El Proceso a la deriva

Nació innovador, llamó la atención y fue consolidándose. La unión de equipos políticos formados como partidos favoreció

la idea de recomponer un nuevo sistema político nacional de integración. Su creación se debió a la necesidad de enfrentar a otro grupo en el poder que consistentemente tomaba fuerza a razón de acusaciones, desafíos, ofensas y abusos. El control del país estaba y está a la deriva con políticas públicas muy equivocadas en materia de seguridad, justicia, educación, salud, diplomacia…todo eso tenía que presentar un replica tan necesaria y contundente que las ideologías antagónicas buscarían estrecharse y transitar por un solo camino. Entonces el sistema se volvió bipartidista: por un lado, Morena, PT y el Verde. Por el otro PRI, PAN y PRD. Estos últimos establecieron el Frente Amplio por México. Los antes contrincantes políticos con ideologías totalmente diferentes se sentaron a estructurar las bases para buscar la posibilidad, explorar el terreno, para llegar a la presidencia. Y lograron lo mejor: incorporar a la sociedad, a esa ciudadanía que había sido ya abandonada por las intereses y deformaciones políticas. Hubo asambleas, convocatorias, se aceptaron aspirantes, se limpió el camino al ir cumpliendo compromisos y requisitos, abrieron foros, todo bien, todo en orden y con ánimo. Los discursos estructurados y la diferencia: lanzar a mujeres para gobernar al país. En los últimos días las fórmulas variaron y se desgastó el proyecto. La determinación sería por encuesta y se adelantaron queriendo comerse al colega partidista. El PAN se creció en la soberbia por el fenómeno Xóchitl e inició presiones. El PRD se adelantó y se definió por la hidalguense sin conocer los resultados de la encuesta. El PRI cuatro días antes de la fecha establecida para oficializar a la candidata dobló las manos. Y volvieron a dejar atrás a la sociedad. Ellos llamaron a consulta pública, emitieron las bases, propusieron las formas y establecieron la fecha (el 3 de septiembre). Beatriz Paredes ante las declaraciones banqueteras y prontas de Alejandro Moreno, su presidente de partido, acerca de que estaba la tlaxcalteca reducida en aceptación, pidió conocer la cifras y un respeto mínimo para ser informada. Hoy la propia Beatriz está obligada a respetar a la sociedad y esperar el veredicto, el que sea, de los participantes civiles el próximo domingo. Las propias organizaciones sociales que han alimentado el proceso anticipan que la voluntad cívica ha superado a los partidos políticos. Entonces estos tendrían que haber esperado hasta la fecha que establecieron para aceptar las conclusiones. Beatriz hasta donde entiendo no ha declinado, ha aceptado las cifras. Mancera y De la Madrid no han recibido respuesta por haber sido descartados aun cumpliendo las reglas. Los grandes estrategas de antaño guardando silencio: Diego Fernández de Cevallos, Manlio Fabio Beltrones, Emilio Gamboa… un silencio impertinente pero que los protege de un ataque frontal de carácter penal o fiscal por parte de Palacio. Ahora se iniciará un nuevo ciclo a partir del 3 de septiembre y otro después del 7. Y de ahí a las urnas el 2024.

CARLOS RAMOS PADILLA
*Conductor del programa VaEnSerio mexiquensetv canal 34.2, izzi 135 y mexiquense radio