Cuando nos asomamos al espejo vemos una realidad franca, incontrovertible. Nos enfrentamos a la verdad, no hay
forma de alterarla. Así es nuestro país. sobrevivimos todos los días, nos enfrentamos cada hora a una dinámica muy distinta a la que nos quiere convencer el gobierno. AMLO nos heredó 200 mil homicidios,100 mil desaparecidos,164 mil abusos sexuales, 55 mil extorsiones, 70 mil asaltos en carretera, 500 mil robos a negocios, Crecimiento menor al 1%,El mayor déficit fiscal en 4 sexenios,La gasolina mas cara de la historia, Menos niños vacunados que en todos los sexenios, pero insisten en que vivimos en paz y somos eternamente felices. Llevamos menos de un mes del nuevo gobierno con una marcada y acelerada inflación en productos básicos, grave crisis constitucional, gasolinas aún con incrementos, préstamos a nombre de México para socorrer hasta con energéticos a Cuba, presos en Estados Unidos que colocan en jaque al gobierno, violencia multiplicada, corrupción, compradazgos y cuotas de poder. En las primeras tres semanas, matanzas en Culiacán, Mazatlán, Chiapas, un funcionario apuñalado en Oaxaca, otro decapitado en Chilpancingo, un sacerdote acribillado en San Cristóbal, enfrentamientos en Tecpan de Galeana, dos ataques a dos líderes en la CDMX, dos coche-bomba en Michoacán… Y la narrativa es simplona: “las armas son de Estados Unidos”, “se abrió carpeta de investigación”, “llegaremos hasta las últimas consecuencias”. Basta con asomarnos a alguna noticiario televisivo, el que sea para enfrentarnos a la verdad: crímenes, asaltos, tiroteos, abusos de confianza, corrupción gubernamental, enfrentamiento entre poderes, desacatos, insultos, amenazas desde el poder, mayoritarios insultantes, descalificaciones a centros de estudio, golpeteo contra instituciones…pero todo está bien, no hay equivocaciones desde la autoría oficialista. Desean que suframos el trastorno que afecta la capacidad de una persona para pensar, sentir y comportarse de manera lúcida, es decir: esquizofrenia. Y cuál es la sabia salida: evitar que las motos ingresen al Centro Histórico de la CDMX, levantar un censo irregular argumentando un nuevo pacto en el sector salud, removiendo a corruptos incómodos a otros cargos buscando impunidad, protegiendo a los contactos útiles con el crimen organizado. Esa es la realidad, es lo que estamos viviendo. No hagamos caso a espejos falsos, al intercambio de joyería por bisutería. Engañar ya es deporte nacional incluso hasta para convencernos de que nuestro ADN está malogrado por el factor histórico con España. Están bombardeando nuestra estima y acercándonos a períodos de rebelión que no se quisieran repetir.
CARLOS RAMOS PADILLA
*Conductor del programa VaEnSerio izzi 135 y radio mexiquense. Meganoticias, TVC.