Nunca se había registrado un acto tan aberrante como el cobijo público que le dieron las legisladoras morenistas a
Cuauhtémoc Blanco. El grupo de izquierda ya había tenido un mal ejemplo de impunidad y protección cuando, recuerdo, José Narró, Alejandro Encinas y Guadalupe Acosta Naranjo dieron protección y escondite a un prófugo como Julio César Godoy Toscano para evadir a la justicia protestando al cargo legislativo y regalándole el fuero. Pero ahora fue más insultante es la conducta de las mujeres, si mujeres morenistas que al griterío de “no estás solo” mostraron varias cosas: que no importa de qué se le acude al exfutbolista, lo van a proteger. Que la mayoría sirve para acomodar la ley a su antojo y con esa consigna ya lo están considerando culpable para que con el fuero no se le puedan aplicar sanciones a las graves acusaciones que le señalan desde absurdos contra mujeres, desvío de recursos, hasta vínculos con el crimen organizado. La administración de los recursos de Morelos de este sujeto como gobernador ha sido la negativa que se tenga memoria. Pero más aún, este individuo que debería de lavarse la boca y la conciencia antes de acercarse a un micrófono como comentarista estelar de Televisa en los partidos del América, donde solo expresa verbal y corporalmente majaderías, ha provocado serios problemas junto con su familia hasta en el marco internacional. Recordemos las “broncas” en los palcos dura y el mundial de Sudáfrica y su ruin comportamiento durante el vuelo de regreso a México. No importa lo que hiso y de lo que se le acusa, el pretexto es que el expediente no está bien integrado. Algo así como cuando Fernández Noroña asegura que a lo mejor los zapatos encontrados en el campo de exterminio en Jalisco, no pertenecían a las víctimas,y con eso el carpetazo inmundo. Blanco debería de enfrentar las acusaciones que se le señalan de frente, no bajo la tutela y protección de señoras enardecidas que solamente cumplieron órdenes de arriba. Estas mujeres deberían de estar exigiendo calidad y justicia para aquellas, también mujeres, que han denunciado los abusos de este individuo, incluyendo un pronunciamiento firme de la "presidenta" (con a) que se lava las manos, en este caso en particular, argumentando la división de poderes. A una señal de Palacio se tendría que llevar a efecto los procedimientos legales en las carpetas de averiguación. Pero vemos que a las frases desgastadas de la señora Claudia Sheinbaum de “no llegue sola, estamos todas” ahora se copia su estilo para defender a un varón, cosa que no se han atrevido a hacer con la ministra Norma Piña, el colectivo de feministas o en su extremo con las madres rastreadoras. Eso les viene guango, ya la vieja costumbre de levanta dedos se ha transformado, como nos tiene acostumbrados Morena, a asambleísmos donde al criterio predominante es el que manda. Qué vergüenza de democracia, que en este país con tanto feminicidio las mujeres levanten el puño y la voz a quien está acusado de abusador. Y lo lamentable es que todos estos y estas viven de nuestros impuestos.
CARLOS RAMOS PADILLA
*Conductor del programa VaEnSerio izzi 135 y radio mexiquense. Meganoticias, TVC