Se enreda caso de departamento de Angélica Rivera en Miami

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El empresario Ricardo Pierdant, el vocero de Presidencia y medios de comunicación continúan descifrando el entramado que rodea a la esposa del Presidente de la República, Angélica Rivera, sobre el departamento lujoso en

una zona exclusiva de Miami y se había informado pertenecían al empresario.

El pasado nueve de agosto el periódico británico The Guardian dio a conocer que la Primera Dama Mexicana estaba haciendo uso de un lujoso departamento valuado en 2.05 millones de dólares en Key Biscayne, al sur de Miami Beach que fue comprado por Grupo Pierdant, una empresa que supuestamente estaría participando en una licitación para realizar puertos en el país, envolviendo, de nueva cuenta, a la pareja presidencial en un posible conflicto de intereses.

The Guardian afirma que Angélica Rivera ocupa la propiedad desde 2009, mucho antes de que contrajera matrimonio con el actual Presidente de México. En ese sentido, el día de ayer en una entrevista para el canal Univision, el empresario mexicano Ricardo Pierdant confirmó que sí le presta el departamento 404 en Miami a la pareja presidencial mexicana y aseveró que es amigo del Presidente Enrique Peña Nieto desde que tenía 18 años, pero negó haberse beneficiado de ello como empresario. “Las cuentas claras y las amistades largas. Como somos amigos, yo no le pido ningún favor” comentó el empresario.

De acuerdo con la investigación de The Guardian sobre las propiedades de Florida, existe una relación poco común entre la Primera Dama y el Grupo Pierdant, pues la propiedad en cuestión está en la Torre Ocean One, una comunidad apartada con alberca, canchas de tennis y un mayordomo de guante blanco. Sin embargo, no se aclara si los vínculos han sido previos o después de su relación con Peña Nieto, por lo que el diario inglés resalta que los acuerdos con la empresa recuerdan lo sucedido con la compra de la “casa blanca” valuada en 7 millones de dólares.

La primera dama, compró la unidad 304 de tres habitaciones en 2005, así lo reveló la misma en noviembre de 2014 durante una aclaración en el caso de la “casa blanca”, además se dio a conocer en ese entonces, que la Primera dama vivió un año en el departamento de Florida con sus hijas.

De acuerdo al programa Univisión Investiga, los departamentos 304 y 404, están conectados por un ascensor privado; y la nota de The Guardian afirma con base a documentos públicos que Pierdant pagó en 2013 los impuestos, es decir, cerca de 30 mil dólares a la propiedad inmobiliaria del apartamento de Rivera, lo cual el empresario negó.

“Eso es totalmente falso, yo pago lo del 404, de ningún otro departamento más. Ese departamento es mío y se acabó”, dijo en entrevista telefónica, pero el medio de comunicación Univision Investiga informó que existen registros de pago de impuestos que “muestran que Biscayne Ocean Holdings, una compañía de su propiedad, pagó los impuestos para la unidad 304, a nombre de una empresa de la primera dama”.

“Pierdant prometió que hablaría con su contador, pero no respondió más mensajes de correo electrónico o llamadas telefónicas”, informó el medio de comunicación en su sitio web.

Dicho empresario también comentó al medio de habla hispana que, una de sus empresas en México fabrica artículos promocionales y ha vendido material al PRI, y que ha acompañado a Peña Nieto en un viaje oficial a China cuando era gobernador del estado de México. “He estado viajando a China durante 25 años. Le dije que sería bueno para echar un vistazo allí”, indicó.

Por otra parte, en un comunicado emitido por la Presidencia mexicana y firmado por su vocero, Eduardo Sánchez Hernández, se afirma que es falso que el departamento de Miami sea el “hogar” de la Primera Dama y que ella hizo público que en 2005 adquirió una propiedad, distinta a la que refiere la nota, en el mismo edificio.

Además, la oficina de comunicación social del Presidente de México, calificó como una especulación dolosa que el diario británico afirme que Ricardo Pierdant es un contratista potencial del Gobierno, pues no se ofrece ningún dato concreto que lo sustente; y destacó que Ricardo Pierdant no ha celebrado contratos con el Gobierno de la República y tampoco participa en algún proceso en curso.   

Dicho documento también refiere que el diario inglés buscó declaraciones del presidente, a lo cual el vocero comentó que dichas solicitudes se hacen mediante su oficina y que en ningún momento se estableció contacto, “ni conmigo, ni con alguno de mis colaboradores sobre este tema”.

El comunicado finaliza comentando que, “en el pasado reciente, The Guardian ha publicado información sobre temas relacionados con nuestro país que ha sido desmentida. En algún caso, tuvo que ofrecer disculpas a sus lectores porque no pudo sostener la veracidad de lo publicado. Siento mucho la falta de profesionalismo de este medio que afecta, sobre todo, a sus lectores”.

Legisladores mexicanos opinan

Respecto al tema que ha creado controversia en todos los niveles de la política mexicana, legisladores de diferentes partidos políticos han calificado como una falta de respeto dicha situación.

En ese sentido, el líder parlamentario de los diputados panistas, Marko Cortés Mendoza, reconoció que es una pena que el actual Gobierno siga envuelto en escándalo tras escándalo, y que se espera que la Auditoría Superior de la Federación abra una investigación y defina si existe o no conflicto de interés en este préstamo aparente del departamento de Miami a la Primera Dama del país.

“Nos preocupa otra vez que el Gobierno de la República tenga que salir a pedir perdón cuando lo que la gente espera no es un perdón, sino que espera hechos concretos que demuestren el deseo de combatir la corrupción y la impunidad en México” afirmó el legislador.

Por su parte, el coordinador perredista, Francisco Martínez Neri, solicitó al Ejecutivo federal explicar por qué la primera dama utiliza dicha propiedad de lujo en Florida, Estados Unidos. “Llama la atención que de nuevo la primera dama se encuentre en una situación como esta, es preocupante que México muestre esta cara a nivel internacional, una cara de un probable conflicto de intereses”, señaló Martínez Neri.

“México vive una situación de pobreza, aunque se quieran maquillar las cifras, para muchas familias mexicanas es imposible vivir en una casa valuada en millones de dólares”, finalizó el legislador.

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