Sin previo aviso y de manera inesperada el presidente, Enrique Peña Nieto, pospuso el homenaje póstumo que le realizaría a cinco " policías caídos" que perdieron la vida tras chocar su helicóptero cuando realizaban labores de rescate en la zona afectada por las lluvias en el estado de Guerrero.
Según Presidencia de la República, el evento cambió de fecha debido a que el primer mandatario de la nación viajó la tarde de ayer al Puerto de Acapulco para continuar encabezando las labores de rescate y reconstrucción de los poblados afectados por las zonas golpeadas por las tormentas tropicales Ingrid y Manuel.
¿Por qué el presidente pospuso el evento de manera intempestiva?, al parecer la respuesta es obvia, los alrededores del puerto de Acapulco se encuentran completamente destruidos, incomunicados y el narcotráfico hace de la suya.
Algunos elementos del Ejército Mexicano han asegurado que cuando ellos entregan las ayudas humanitarias al lugar donde se necesitan, vivales se las quitan, las juntan y las venden.
Es decir, el gobierno del estado encabezado por Ángel Rivero no ha tenido la capacidad de asegurar el consumo de la ayuda humanitaria a quien más lo necesita, por lo que la corrupción también está presente en momentos de desastre.
Es una pena que nuestro ejército tenga que enfrentar trámites burocráticos para lograr cumplir sus funciones al 100 por ciento, por lo que se necesita la presencia del primer mandatario para que el gobernador de izquierda reaccione, por lo que al parecer no lo ha hecho así.
Se espera, que el primer mandatario de la nación tenga la intención de realizar una reconstrucción severa de Acapulco y sus alrededores, por que inclusive antes del desastre los poblados ya se encontraban en malas condiciones, permitiendo el gobierno asentamientos irregulares y el trabajo del narcotráfico sin ninguna restricción.
Cabe recordar, que el primer mandatario ha urgido a los gobernadores de los estados afectados por "Manuel" e "Ingrid" a evaluar los daños, a efecto de hacer un ajuste en el Presupuesto de Egresos de 2014 para que haya una partida dedicada a la reconstrucción.
Reconoció que los 12 mil millones de pesos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) serán insuficientes para reparar los daños, por ellos la necesidad de apurar la evaluación en cada una de las entidades afectadas.
En el albergue ubicado en la Preparatoria de la Universidad de Sinaloa, donde se encuentran 5,000 damnificados, el Ejecutivo federal expresó que los momentos difíciles y de contingencia son una oportunidad de "sacar la casta y entereza" para superar la crisis.