Honrando su labor y reconociéndoles su servicio a la patria, el presidente, Enrique Peña Nieto, rindió un homenaje póstumo a los cinco federales que murieron al estrellarse el helicóptero en el que viajaban cuando trasladaban víveres en la sierra de Guerrero.
En el Centro de Mando de la Policía Federal en Iztapalapa, en presencia de los deudos de las víctimas, a quienes el Mandatario federal entregó el lábaro patrio que cubría los ataúdes de los elementos policiacos.
Frente al recién inaugurado monumento al Policía Caído, fueron colocados cuatro ataúdes y un pequeño retrato de los agentes, exceptuando el quinto cuerpo que aún no se ha identificado.
Durante la ceremonia se explicó que sólo había cuatro féretros en razón de que hasta esta mañana fueron localizados los restos del policía primero Isaac Escobar Bustamante, dándose cuenta de esto a sus familiares.
De traje y corbata negros, el Presidente pidió se ofreciera un minuto de aplausos en memoria de los federales, los cuales se dieron con gran ahínco.
"Mis más sentidas condolencias a sus padres, esposas, familiares, amigos y compañeros", manifestó el Mandatario, quien estuvo acompañado del Gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, y de los secretarios de Gobernación, Defensa y Marina, así como del Procurador General de la República.
Antes de que entregase la bandera a los deudos, Peña montó una guardia de honor junto a los féretros al igual que los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, Defensa, Salvador Cienfuegos, Marina, Vidal Francisco Soberón Sanz, el procurador, Jesús Murillo Karam y el Comisionado Nacional de Seguridad (CNS), Manuel Mondragón y Kalb.
Al terminar la solemne ceremonia, los presentes cantaron el himno de la Policía Federal en honor a los agentes muertos, por lo que cinco helicópteros “Blackhawk” surcaron los cielos, para que después otra aeronave lanzara al vació pétalos de rosa amarillos.
Los elementos policiacos que fallecieron en la tragedia fueron Isaac Escobar- no identificado-el comisario piloto capitán Enrique Briseño Martínez, el subinspector copiloto capitán Desiderio Rosado Zárate, el policía tercero Julio César Zarco Castro y el policía segundo José Ramón Peláez Prado.
En tanto, el Comisionado Nacional de Seguridad (CNS), Manuel Mondragón y Kalb remarcó que los policías federales fallecidos habrían concretado alrededor de 600 rescates en Guerrero y trasladado 88 toneladas de alimentos, como parte de sus tareas de auxilio tras el paso de "Manuel".
En la ceremonia, el Comisionado Nacional en Seguridad, Manuel Mondragón y Kalb, aseguró que los elementos eran especialistas en aeronáutica, quienes ya habían realizado varias veces el trayecto rumbo a La Pintada, en Atoyac de Álvarez.
Frente a familiares, amigos y compañeros de los fallecidos, el funcionario sostuvo que el Gobierno federal les rendirá apoyo y no los dejará en el desamparo.
"A sus familias nuestra total solidaridad; los acompañamos del brazo en su duelo. A sus esposas y compañeras ratificamos que estaremos con ustedes y con sus hijos; algunos recién nacidos y que otros que nacerán en días. No quedarán en el desamparo", exclamó.
En entrevista para El Punto Crítico, algunos policías que se encontraban en la ceremonia a sus compañeros comentaron que los helicópteros Blackhawk que la corporación tiene en su poder no ha recibido el mantenimiento adecuado.
Sin decir su nombre, el agente destacó que muchos de los equipos con los que cuenta la corporación se encuentran en su mayoría en pésimas condiciones, por lo que le pidió al Gobierno Federal su mejora.