El anuncio de la Contraloría General del Gobierno del DF sobre el caso de la Línea 12 del Metro sigue siendo un fallo partidista y los inhabilitados son chivos expiatorios; los perredistas están cobijados.
Tal y como se advirtió el pasado 10 de septiembre durante el anuncio del primer paquete de funcionarios sancionados por las irregularidades que mantienen cerradas 11 de las 20 estaciones de la Línea Dorada, la Contraloría capitalina se equivoca por segunda ocasión al revelar sanciones a un nuevo listado de servidores públicos menores y el endurecimiento a otros que ya se había sancionado en aquella ocasión, siguen faltando en esas listas varios funcionarios de primer nivel.
Pues lo único destacable del anuncio consiste en reforzar la sanción impuesta al ex director del Proyecto Metro, Enrique Horcaditas, pero a los perredistas responsable del desastre sigue sin tocárseles ni con el pétalo de una sanción.
Lo advertimos en su momento, las autoridades capitalinas no logran recuperar la credibilidad perdida en la imposición de sanciones al escándalo de corrupción más grande de la pasada administración y en la historia de la capital.
En las sanciones debería estar el ex director del Metro, Francisco Bojórquez; sin embargo, una vez más vemos un fallo a todas luces de sesgo partidista, no lo incluye en estas sanciones. Desde que se conoció el escándalo de la Línea 12, hemos denunciado y advertido que la investigación respecto a los responsables de la suspensión de 11 de las 20 estaciones de la Línea 12 del Metro debía arrojar resultados contundentes y sanciones ejemplares; sin embargo, la Contraloría General sólo inhabilita a uno de los principales personajes del consorcio constructor y no al del PRD.
Diputado local PAN.
Presidente Comisión de Hacienda ALDF
@hector_saul1
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