En el sexenio de las “verdades históricas” como en el Caso Iguala valdría la pena preguntarnos si también hay una verdad histórica en el caso de las gasolinas que se consumen en México y que tienen a la Zona Metropolitana de la Ciudad de México en la peor crisis ambiental y en donde ya se prevé y un incremento en las enfermedades y muertes relacionadas con la contaminación.
Lo cierto es que en lo que va del año, es decir casi cinco meses, sólo hemos tenido 19 días con aire limpio en la asfixiada y ex “Región Más Transparente del Mundo”. Los programas de los gobiernos federal y de la Ciudad de México como el endurecimiento del “Hoy No Circula” no han dado resultados y la capital sigue inmersa en una nata gris.
- Cuandoempezó a manejar la versión de la importación de gasolinas de China de mala calidad como las causantes de esta crisis, de inmediato las Secretarías de Energía; Medio Ambiente; y , Pemex, desmintieron ello y sin aportar pruebas científicas, contratos de la importación de combustibles dieron la “verdad histórica” del tema.
José Antonio González, director de Pemex, expuso que el 90 por cientode las gasolinas que importa México provienen de Estados Unidos y el 10 por ciento restante de países europeos como Holanda, Italia, España, Francia, Inglaterra, Bahamas, Antillas Holandesas y Trinidad y Tobago.
Agregó que los hidrocarburos importados cumplen con las normas ambientales, por lo que refutaron que estas no son las causantes de las condiciones atmosféricas en la capital del país.
La subsecretaria de Hidrocarburos de la Secretaría de Energía, Lourdes Melgar Palacios, ha dicho que cada lote que importa Pemex presenta un informe emitido por un laboratorio del país de origen. Es decir, los mismos vendedores se auto certifican. Faltaba más que alguien vaya a reconocer que su mercancía no sirve.
Sin embargo, no hay ningún estudio científico reciente por parte de la UNAM, del IPN, del Instituto Mexicano del Petróleo, en este tema. Tampoco de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas) quienes en meses recientes se habían quejado de la ausencia de protocolos en Pemex para verificar la calidad de las gasolinas importadas.
Suponiendo que las gasolinas que importa Pemex no son chinas. Ello garantiza que son de óptima calidad sólo porque vienen de Estados Unidos o de otras naciones. Qué nadie en Pemex sabe que muchas empresas chinas triangulan sus productos vía otras naciones para se vendan a un tercer país.
Hace unas semanas, Héctor Riveros Rotge, investigador del Instituto de Física de la UNAM, señaló que en 2006 el gobierno reconoció que la contaminación había incrementado por la mala calidad de las gasolinas, lo que dio origen a la norma 086 "lo que obligaba a Petróleos Mexicanos (Pemex) a que a partir de 2009, todos los combustibles nacionales debían tener 30 ppm en promedio de azufre y máximo 80".
Incluso la Secretaría de Salud expuso hace unos días que cada año se registran 22 mil 500 muertes por contaminación atmosférica, sin embargo con el aumento de los niveles en el Valle de México las cifras podrían aumentar hasta 19 por ciento.
Un reciente estudio de la UNAM recomendó al Gobierno de la Ciudad de México y la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) solicitar la Procuraduría Federal del Ambiente (Profepa) realizar pruebas rigurosas cada tres meses, de verificación del contenido de azufre en los combustibles. Nada de eso ha recomendado Miguel Ángel Mancera ni la dichosa Came.
A la par del fracaso del Programa Hoy No Circula y todas sus versiones que en nada han paliado la crisis ambiental, no será el momento de que la UNAM, el IPN o el Instituto Mexicano del Petróleo o la Profepa tomen muestras de las gasolinas que se vende en la Ciudad de México y nos diga por lo menos por cual contaminante nos vamos a morir mientras asimilamos la verdad histórica. Tal Cual.