Desde finales del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, el sector de la vivienda en México comenzó a presentar síntomas de deterioro, por la forma en que se desarrollaba la política pública en la materia, que más bien parecía no haberla.
Cada institución gubernamental encargada de aplicarla y los responsables de ellas, léase Infonavit (Víctor Borrás), Fovissste (Manuel Pérez), Sociedad Hipotecaria Federal (Javier Gavito) y Conavi (Ariel Cano), a cuyos titulares se les conocía también como los cuatro fantásticos, iban por la libre y no había una sola dependencia encargada de coordinarlas.
El síntoma más grave de ese deterioro se presentó con la quiebra de las principales desarrolladoras de vivienda, sobre todo Geo, Homex, Urbi y Sare, que a la fecha no logran salir del todo de su crisis financiera. Estas empresas fueron por mucho las predilectas de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Todo esto viene a colación porque el pasado lunes, el Presidente Enrique Peña Nieto criticó las políticas de vivienda de sus antecesores. “Así de absurdo es lo que estaba ocurriendo”, dijo el mandatario sin empacho alguno.
Por ello –dijo– se determinó realizar cambios sustanciales en el sector para esta administración, entre otros aspectos para conjuntar los esfuerzos, dispersos, que antes había, de los diversos organismos de vivienda (Infonavit, Fovissste, banca de desarrollo del Estado), y adoptar criterios homogéneos en la construcción de viviendas.
Impensable, pero así ocurrió por muchos años. El que se edificaran viviendas con características no propias y no dignas para las familias beneficiadas, con una sola recámara [...]. Efectivamente, se construyó mucha vivienda, vivienda que, por cierto, hoy está deshabitada, porque a la gente le resulta mucho más caro tener que trasladarse de donde eventualmente recibió una vivienda, al sitio en que está su trabajo.
Nada más cierto que lo expresado por el Presidente de la República sobre la absurda política de vivienda del pasado. Pero lo que no dijo el mandatario es que también resulta un absurdo que los constructores de hoy, los beneficiarios de la actual política de vivienda y de los subsidios a la construcción, entre otras canonjías que les ha brindado la presente administración, son los mismos del pasado, sólo que ahora el grupo predilecto del Gobierno Federal es otro.
Por cierto este miércoles se revestirá de mucha información sobre el sector de la vivienda con la realización del XXIX Encuentro Nacional de Vivienda. Se tiene prevista la asistencia de los representantes de la industria, legisladores y funcionarios públicos, encabezados por Rosario Robles, titular de la Sedatu, quien tomará la protesta al nuevo Consejo Directivo de la Canadevi que preside Carlos Medina Rodríguez. Miguel Ángel Mancera Espinosa, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, estará presente en dicha reunión.
Escribanos a This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it., también síganos en http://www.habitatmx.com/ *Periodista. Director de la Revista HábitatMx