“Problema que se soslaya, estalla.”
Jesús Reyes Heroles.
Hace unos meses los alcaldes electos distintos a MORENA, crearon un frente ante el gobierno de la Ciudad de México, específicamente ante la Jefa de
gobierno. Desde entonces se han venido dando una serie de desencuentros, reacciones y síntomas de conflictos que están trascendiendo de lo político a lo personal.
La reacción de Claudia Sheinbaum no fue la más cordial ni la más politica de todas, sacó del ostracismo senatorial a Martí Batres y lo nombró secretario de gobierno, y esta desafortunada designación ha radicalizado y generado tensión en las formas de hacer politica. Después se han tomado decisiones de la administración pública y del poder político que pareciera que los cuatroteologistas de la CDMX están decidido a ir a la confrontación.
Posponer la transición de las alcaldías, formar oficinas alternas para la operación de los programas federales en las demarcaciones, reformar la ley de seguridad ciudadana para que los alcaldes no rotulen las patrullas, entre otras cosas, no son más que navajazos de pandillero en el callejón de los golpes. Así está actuando en el gobierno de Sheinbaum.
¿En todo esto para qué UNACDMX? ¿En qué ha funcionado UNACDMX ante esta circunstancia, ante la estrategia del gobierno?
Primero. La Unión de Alcaldes de la Ciudad de México no tiene clara su existencia, su razón de ser, su propósito político. Esta destinado a fracasar ante la hoguera de vanidades de la mayoría de sus integrantes,
Segundo. La Unión de Alcaldes debe ser un espacio que los ciudadanos no tienen para poder expresarse y poder hacer una voz de millones de vecinos anónimos que demandan un servicio o una respuesta por parte del gobierno.
La UNACDMX debe ser el sitio privilegiado para hacer politica con las autoridades del gobierno de la ciudad, para gestionar ante las autoridades las necesidades financieras, técnicas, operativas de sus demarcaciones.
Tercero. La Ciudad de México, sus habitantes y los gravísimos problemas que vive solicitan de un grupo de políticos con habilidades y cualidades para el dialogo, la negociación, la edificación de consensos y la solución definitiva de los problemas.
Cuarto. Las y los alcaldes que integran esta organización, necesitan de la elaboración de por lo menos tres elementos esenciales: una agenda temática de las causas de la sociedad civil; una estrategia de dialogo y negociación seria, responsable y de amplio, y, la edificación de grupos profesionales en comunicación, planeación estratégica, políticas públicas, gobernabilidad y gobernanza. Son alcaldes, no todólogos, son gobernantes electos no activistas eternos.
Por último. La violencia politica que se vivió el día de hoy, es una demostración de que se soslayó el problema y estalló, no del todo, pero estalló. Los políticos, dirigentes partidistas, gobernantes y legisladores de la Ciudad de México se ponen a hacer politica o todos perderán, empezando por los habitantes.
Desde algún lugar de la Ciudad de México, 30 de agosto del 2021