"Por el bien de todos, primero los pobres", es el lema que alguna vez usó Andrés Manuel López Obrador, tanto para su campaña donde consiguió la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal, como para sus candidaturas a la presidencia de la Republica, porque a decir de él, estas palabras representan más que un lema, es decir, trascienden como un principio fundamental y a la postre se convertirían en su filosofía de su gobierno. Sin embargo, pareciera que con sus últimos actos, el tabasqueño infringe y contradice sus máximas y postulados pues es exactamente a este sector a quien más afecta a través de sus acciones que se van guiando por sus pretensiones políticas.
Ciertamente, el conflicto de la CNTE con la implantación de la Reforma Educativa en México ha tomado una nueva vertiente con la reciente detención de sus dirigentes Rubén Núñez y Francisco Villalobos, ahora más crítica que las anteriores y sin duda definitoria; y también es cierto que ese movimiento ha sido ya aprovechado para sacar raja política, al caso concreto, por Andrés Manuel López Obrador, y es que al final del día cada maestro disidente significa un potencial voto.
Luego entonces, sin importar los innumerables actos vandálicos en que han incurrido los profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, los reiterados plantones en centro y sur del país, las vejaciones del 31 de Mayo pasado a maestros de la tercera edad ocurridas en Comitán, Chiapas, y los casi dos millones de alumnos afectados tan solo el primer semestre de 2015 en estados que dicho sea de paso tienen a los niños más necesitados de este país (Michoacán, Guerrero y Oaxaca) el líder Nacional de Morena reafirma su pacto con la CNTE pues recordemos que justo en vísperas de las elecciones del pasado 5 de Junio, AMLO hizo patente en Veracruz, Oaxaca y Chihuahua, su voluntad de conjuntar en un solo frente la causa de la coordinadora y la de su partido, a cambio por supuesto del sufragio magisterial.
Y ahora, como acto final e inmediatamente después de la detención de los líderes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, acusados de lavado de dinero y operaciones con recursos de procedencia ilícita por un monto de hasta “132 millones de pesos” provenientes de comisiones ilegales de 3.5% que Núñez y compañía cobraban del salario de sus agremiados y a costa por supuesto del erario público que pagaba a esos maestros, Andrés Manuel López Obrador, anuncia su apoyo incondicional a este movimiento, generándole una comisión encargada de su defensa y anunciando una marcha en favor de esta organización para el próximo 26 de Junio.
En resumen, la CNTE no es el verdadero magisterio mexicano, los números muestran que se trata de una apéndice que ha tratado de conservar sus añejos privilegios vulnerados hoy por una ley que es aceptada por el grueso del sector magisterial y AMLO pierde la congruencia con este actuar pues los pobres que trata de defender, son los primeros que arrolla con su voraz sed de adeptos para MORENA.