La propuesta del Revolucionario Institucional

loblanco   

 El primer sismo ocurrido el pasado 7 de septiembre que afectó principalmente a los Estados de Chiapas y Oaxaca, dejó entre oír las primeras voces de la ciudadanía  que clamaban por la participación de un sector que con los años ha ido opacándose dentro de la vida pública de México, me refiero al de los partidos políticos; el segundo terremoto del 19 de septiembre,  hizo que aquellas voces se convirtieran en una realidad, y la forma de materializarse sería a través de la plataforma virtualchange.org. A los pocos días, la

petición: “Asignar los recursos de las campañas políticas a víctimas y zonas afectadas por los sismos” sumaria la cantidad record de más de un millón y medio de firmantes y pronto los partidos políticos se verían obligados a pronunciarse sobre este respecto.

     La posición era clara, la ciudanía estaba pidiendo que tanto los partidos políticos y el INE se solidarizaran con los miles de damnificados, haciendo uso para tal efecto, del recurso financiero que a aquellos les es autorizado con motivo de realizar sus propios fines. Ciertamente, las fuerzas políticas mexicanas se vieron obligadas tanto moralmente como también por necesidad de legitimación y aprobación social a unirse de inmediato a esta causa y finalmente, tanto la Secretaria de Hacienda y Crédito Público como el Institutito Nacional Electoral a través de sus respectivos titulares José Antonio Meade y Lorenzo Córdova, reconocieron que legalmente si existen mecanismos para que esta donación acontezca.

     Hasta este fin de semana (24 de septiembre) las donaciones propuestas estaban así: El Partido Revolucionario Institucional (PRI) dijo que donaría 258 millones de pesos, MORENA por su parte propuso que se destine a esta causa el 50 por ciento de sus recursos, el PAN también 50 por ciento y Movimiento Ciudadano el 100 por ciento de su presupuesto. 

     Sería el Partido Revolucionario Institucional, quien el 25 de Septiembre se convertiría en el primer instituto en hacer realidad sus promesas, presentando ante el INE la solicitud de renuncia del monto que hemos referido y exhortando a través de su Dirigente Nacional Enrique Ocho Reza a los otros partidos a hacer lo mismo en este momento, con lo cual aportarían en este 2017 cerca de 1000 millones de pesos. 

     Sin embargo, la cuestión no terminaría ahí, pues en ese mismo marco, el Revolucionario Institucional anunciaría el impulso a una reforma constitucional para eliminar el 100 por ciento del financiamiento público a los partidos políticos mexicanos, así como la desaparición de los legisladores plurinominales, hecho que de llegar a cristalizarse contribuirían con 20 mil millones de pesos para la reconstrucción del país.

     Ciertamente, no se tiene la certeza de que una propuesta de tal magnitud este en camino seguro a convertirse en una realidad; pero ponerla sobre la mesa, envía un fuerte mensaje por parte del PRI, mismo que está cargado de responsabilidad y de empatía con una situación que demanda cambios inmediatos y que por sobre todo, es una respuesta que la ciudadanía ha buscado por años y años. En pocas palabras el Revolucionario Institucional traza la directriz de un hecho sin precedentes, corresponderá a los otros partidos convertirlo en realidad, responderle a México con sus actos y con sus desiciones