Después de rechazar que se ampliara su mandato como ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
(SCJN), el doctor Arturo Fernando Zaldívar Lelo de Larrea, culminó el 31 de diciembre 2022 sus labores como marca la Constitución, en un breve resumen podemos señalar que, en los cuatro años de su responsabilidad, al gobierno actual le fueron invalidadas varias leyes trascendentes y el presidente siempre les respeto, nunca fueron sometidos y tanto él como los diez ministros de la Corte se ajustan a la Constitución y a los derechos humanos.
En otras ocasiones el presidente del Alto Tribunal, Arturo Zaldívar, también ha reconocido que han trabajado con independencia y autonomía y ha dicho: “sin la Suprema Corte no podría haber democracia constitucional, los derechos humanos no serían sino retórica, ni podría haber esperanza para que se logre un país más justo e igualitario”.
Sin embargo, ha sido criticado en diversas ocasiones ya que supuestamente se ha subordinado a las decisiones del Presidente de México, como fue el caso de la aprobación para que las Fuerzas Armadas puedan desempeñar tareas de seguridad pública.
La renovación de la Presidencia se llevó a cabo el 2 de enero, en el proceso participaron cinco ministros aspirantes: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, quien por casi 20 años tuvo práctica privada en distintas firmas de abogados nacionales e internacionales; ocupó cargos en el sector hacendario y desde el 2012 es ministro de la SCJN, presentó “Líneas generales para el fortalecimiento del Poder Judicial de la Federación”, abocándose a mejorar la administración interna de la Corte.
Javier Laynez Potisek, inició su carrera profesional en 1983 con diversos cargos en la Procuraduría Fiscal de la Federación y otras más; y en 2015 fue ratificado por el Senado como ministro, presentó su proyecto “Suprema Corte de Justicia de la Nación. Consejo de la Judicatura Federal”, para que el Poder Judicial sea uno de los pilares del Estado.
Alberto Pérez Dayán, ministro desde 2012, tutor académico de Estudios de Posgrado de la Facultad de Derecho de la UNAM y otras instituciones, su trabajo versó sobre “Presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y del Consejo de la Judicatura Federal” centrándose en la campaña de desprestigio hacia el Poder Judicial, por lo que aplicará la política de cero tolerancias a la corrupción.
Además de las dos mujeres ministras, entre ellas Yasmín Esquivel Mossa cuenta con más de 35 años de trayectoria y en los últimos 22 años en el ámbito jurisdiccional, ministra desde 2019, presentó “Justicia para TODAS las personas” con una mayor participación en la administración del máximo tribunal, misma que sigue involucrada la investigación iniciada por la UNAM por un presunto plagio de tesis de licenciatura en los años 1986-1987.
Finalmente, Norma Lucía Piña Hernández ministra desde 2015, presidenta de la Primera Sala, su propuesta en “Líneas Generales de Trabajo” buscando la independencia judicial, su carrera profesional la he llevado en el Poder Judicial Federal, resultó electa por seis votos y los otros cinco los obtuvo el ministro Gutiérrez Ortiz Mena.
Se viven nuevos tiempos en el Poder Judicial Federal, quien debe ser garante de los derechos humanos y la legalidad establecida en la Constitución Federal, por ser parte de la División de Poderes que hacen contención del poder con el poder mismo.
Eduardo Blanco