Picotazo político 18 de diciembre 201…

A partir de la siguiente semana la marea de las noticias irá disminuyendo, naturalmente el ritmo de las cosas

 cotidianas vivirán su propio descenso en una necesaria pausa, pero como pocas veces, un grueso de la sociedad le pondrá pausa a la maquina con cierto nivel de ansiedad, producto de la incertidumbre y no es para menos, la siembra de este 2019 no promete grandes cosechas, el clima en el horizonte no garantiza días soleados, y no se trata de fatalismo ramplón o de ocurrencias.
Es claro que los mexicanos respiramos uno de los ambientes mas enrarecidos de que se tenga memoria, con señales de una próxima catástrofe económica o el profundizamiento en el abismo de la inseguridad. Nadie quiere ser pesimista, pero la salud mental nacional no da muestras de ir ganando en confianza o simplemente en esperanza de que nos vaya a ir mejor a todos.
Una parte vital para reencontrar el foco de proyección es que desde el mismo poder presidencial se muestren las señales de que se quiere corregir algunos aspectos que evidentemente han dado muestras de haber sido malas decisiones. AMLO ya ha tenido un par de experiencias en donde sale y asume la parte que le toca, posee una conexión con sus seguidores en donde se puede mostrar como un ser humano que se equivoca pero corrige, "enmendar es de sabios", él mismo lo ha dicho.
Para nadie es un secreto que la cancha económica no es lo suyo y que haber decidido frenar el furgón de la economía llevó al cuerpo nacional a un cuadro de crisis severa, que si bien no detonó en una crisis social, sí agudizó la pauperización de los bolsillos de millones, pero el error ya está hecho, las sospechas de que no saben qué hacer con el equipo quirúrgico es más que real, por ello, la única salida que se tiene de frente es que el propio Presidente nos cierre la boca a todos y sea el próximo año el estadista que quiere ser, remendar las fibras sensibles de algo, que por décadas, ha significado el gran tumor, el lastre más doloroso, el de ese campo de la economía, en donde las reglas de juego sólo han beneficiado a unos cuantos y empobrecido a millones, y no es posible que en la búsqueda de "hacer las cosas diferentes" sea este gobierno el que termine dándole el tiro de gracia a distintos sectores debido a que se decide "meterle freno" así por que sí a la maquinaria de gobierno y sus líneas de inversión.
Así es, este gobierno "macheteo" la inercia en un país que de alguna manera se movía e iba dando pasos en cierta ruta de estabilidad, pero la 4T se hizo de el tablero de control y para marcar diferencia lanzó sendas órdenes y entrar en la ilógica ruta de cortar los dineros.
Importantes sectores de la construcción, de prestadores de servicios, de cientos de empresas que han dependido de los contratitos o contratotes con el gobierno, así como estados de la República, municipios, entidades desconcentradas, oficinas del mismo gobierno se vieron sometidas a una serie de cirugías sin anestesia, nomas por que sí, nomas por "había que ser diferentes".
Los costos han lastimado, se tiene que corregir esto, punto. No hay más, pues si la economía no mejora, los beneficios de los programas de gobierno sólo llegan a unos cuantos, a manera de cooptación electoral sin resolver la raíz de todos los males y que no es otra cosa que la pésima distribución del ingreso. No bastarán más aumentos a el salario mínimo, insistiré: se deben generar mas fuentes de empleo, que los que fueron despedidos sean contratados nuevamente, que se premie el esfuerzo y la dedicación en los distintos gobiernos y no sólo la lealtad a una camiseta de partido.
Se han lanzado muchos "ya basta" en materia de seguridad, de feminicidios, de secuestro, de extorsiones, la lista es larga ...pero "el ya basta " a las ocurrencias económicas, a la inexperiencia. Esta en la lista de espera y de no enmendar, las calles podrían ser el próximo escenario de lo que en Colombia, Chile, Bolivia ocurre...