Picotazo político 20 de febrero 2020

La estampa define lo que nos está ocurriendo: se trata de un par de jóvenes, al parecer padres, en situación de calle, aquí, hoy, en la plaza de la información, drogados, él, con

 golpes en el rostro, hinchado, ella sucia, atascada de solvente en la cara... acompañados de tres menores, dos niñas y un varón, ¿sus hijos? No sabemos. Un pequeño núcleo familiar en degradación total, muertos en vida.
Van las preguntas: ¿quién o quiénes deberían socorrer a estas criaturas? Puesto que, a ellos, los adultos no se les puede tocar, por que ya se la saben y acusarían a los policías de abuso, sin descontar que los polis no querrían llevarse a este ejército de zombis.
¿En qué parte de la Constitución esté escrito el que el gobierno permitirá que, a seres inocentes, ajenos a la protección de los adultos, sean expuestos a una condena entre miseria, mugre y drogas?
Ya no hay estupor, da igual el que a una menor como Fátima se le viole y se le deje como si de un animalito de rastro se tratara, el que a un bebé de cuatro meses en Saltillo se le ejecute, si, escucho Ud. bien, ejecute como si de un sicario rival se tratara.
La mente humana es un acertijo que se escribe entre sombras y luces, así ha sido, pero no siempre se llegan a ver estos niveles de bestialidad, y ¿Dónde empiezan? ¿Cuándo comenzamos a tratar a los demás como seres insignificantes, con poco valor y, por ende, sin derecho a ser respetados en su integridad? Esto no tiene que ver con neoliberalismo, tiene que ver con una salvaje condición humana producto de la eterna corrupción de todos los sistemas, ¿no ha caso algunos sacerdotes han figurado como los depredadores más agresivos en contra de nuestros niños? ¿consecuencias? Pocas. ¿no ha caso son los políticos sinónimo inmediato de riqueza e impunidad? Sean del partido que sea, luego entonces ¿Qué mensaje recibe esta sociedad cuando se le exige pagar impuestos o cumplir con no meterse al carril de metrobús si hay figuras en las zonas de poder que huelen a tranza e impunidad?
Lo hemos dicho, la pobreza económica se soluciona trabajando y no creyendo en la dádiva del gobierno, pero la pobreza intelectual y moral, esa sí, genera todos los abismos, pues a un ignorante no le alcanzará para distinguir el tipo de país que pisa y sobre todo, quienes le ofrecen un paraíso sin ningún tipo de esfuerzo, ni dedicación.
Desde hace un par de décadas, los tumores se alimentan de muerte, de fosas clandestinas, de ejecuciones, de esa inentendible bestialidad, pero ya se ha rebasado el infierno de los cárteles, la brutal muerte ya pasó a ser del ámbito doméstico y muchos se convirtieron en demonios, capaces de cometer los actos más atroces en contra de seres realmente indefensos.
El diablo está escribiendo su versión en este suelo, lo estamos viendo todos los días, pero tal y como lo señalo al inicio de este comentario, en pleno centro de la ciudad, el retrato vivo ya no del cinismo del estado, sino de toda la sociedad, visto ya como la madre de todas las indolencias, del valemadrismo más puro...que nadie se asuste, vamos en una locomotora que tarde que temprano se saldrá del eje por el tiradero de cadáveres sobre las vías...en serio, ¿Cuál será el limite de todo esto?