Los especialistas le llaman "los días cero", fechas en donde simplemente no habrá más agua para consumo humano un panorama alarmante para el planeta entero y desgraciadamente
nada lejano. Es estrés hídrico es de una magnitud que arroja una serie de pronósticos nada halagüeños. Naciones que por su condición árida caminan ya en los límites del desastre, se trata de naciones en done viven más de un cuarto de la población del planeta; India, Irán o Botsuana, lugares que enfrentan la sequía total o en contraste, debido al cambio climático; el otro rostro del drama, lluvias brutales como las de Sao Paulo en Brasil, que tras una sequía prolongada recibe cantidades asombrosas de lluvia generando un circulo de desastre, por que mueren de sed o ahogados, usted escoja.
Los centros urbanos en muchas regiones han desecado sus mantos freáticos, la Ciudad de México es uno de esos ejemplos, llevamos años escuchando este guion de terror y acostumbrándonos a que cada vez sea menos la cantidad de agua que nos llegue al abrir la llave. La mancha urbana se convirtió en un asesino del subsuelo provocando el hundimiento acelerado de la capital y se debe reconocer que no hay autoridad ni políticas de largo alcance que detengan el nivel de depresión acuífera.
En pocos años, sino es que en meses, la mezcla entre vivir en una zona sísmica y amplias regiones del subsuelo cavernosas nos estarían empujando a un coctel indescriptible pero mientras eso ocurre, la cuenta regresiva para que de plano estallen todas las crisis por el agua está a la vuelta de la esquina.
Para el 2030 se contempla que sean 45 grandes urbes las que se incluyan en la franja de situaciones altas de estrés hídrico, o sea, sin agua y con potenciales revueltas de orden social producto del desabasto. En zonas de esta capital mexicana se han visto con mayor frecuencia distintas protestas por la falta de agua, colonias que van perdiendo la recepción y que ni el ridículo contingente de pipas cubren la demanda, la ruta no variara según los expertos, los días por venir no auguran algún tipo de cambio.
Los seres humanos estamos acostumbrados a reaccionar cuando ya es muy tarde, cuando las desgracias ya tienen cuerpo y medio en nuestras vidas, pero el reiterado llamado para que tomemos conciencia sobre esto no debe desecharse. El futuro ya nos alcanzó, será seco y furioso.
No es regaño, es Picotazo Político
Miguel Ángel López Farías
Historiador. Director y conductor del programa radiofónico 'Urbe de Hierro', transmitido por ABC Radio 760 AM de 4 a 5pm.
Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT).
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