Hace quince días, el obispo emérito de Chilpancingo Guerrero, monseñor Salvador Rangel Mendoza desapareció y
reapareció dos días después en un hospital en el estado de Morelos .
Las autoridades judiciales afirmaron que no fue secuestrado,sino que el prelado habría ingresado a un motel en compañía de otro hombre .
Los análisis clínicos arrojaron que traía cocaína en la sangre y otro tipo de estupefacientes.
Don Salvador,una vez que se repuso , envió un comunicado otorgando el perdón a quienes lo injuriaron y puso fin a esta historia señalando que no levantaría ningún tipo de denuncia.
Aquí hay dos versiones,una falsa y la otra real. No voy a cuestionar quien dice la verdad, sino, que esto abre un tema que por siglos se ha evitado en los intestinos de la iglesia católica ...y no precisamente sobre las preferencias sexuales de los sacerdotes , sino el celibato .
En el año 1123 el Papá León IX y años más tarde (1139) el Papa Gregorio VII instituyeron en los dos concilios de Letrán el que los clérigos no podían casarse o relacionarse con concubinas ( se les olvido incluir eso de concubinos ). El argumento rezó en que buscaban acabar con la degradación moral de la iglesia .
Hombres al fin y al cabo, humanos con deseos y necesidades humanas , fueron disimulando sus apetitos carnales , mismos que repudiaban en público ,pero que sucumbian en privado.
Claro que está ,que muchos sacerdotes ( incluimos a monjas ) han llevado una vida celibe que merece todo nuestro respeto ,sin embargo ,las notas de escándalo sobre casos de abuso sexual en contra de niños , (recordemos al padre Maciel y muchos más ) han llevado a la iglesia a vivir momentos de crisis , por lo que las voces progresistas dentro de la iglesia católica lanzan el planteamiento de que los candados del celibato sean destruidos y se de paso a una nueva etapa sin hipocresías ,con la naturalidad de una iglesia que promueva los principios de Jesús de Nazaret sin descuidar los valores del ser humano y sus propias debilidades...o quien sabe , sus virtudes.
Expreso esto con profundo respeto: si monseñor Salvador Rangel gusta de la compañía de otro hombre ( ojo , no de un niño) y el ,como debe haber muchos de closet , es momento de que esa vieja institución abra sus ventanas y mire los pasos del mayor líder de la humanidad,de todos los tiempos , Jesús y sus enseñanzas sobre amor al prójimo ,el perdón y la compasión y no estoy diciendo se de una estampida del closet ,sino de que se corrijan los graves errores sobre abuso sexual que se tienen documentados en contra de niños o de monjas.
Se trata de una prohibición absurda, de una mentira que fue utilizada para evitar que los sacerdotes se casaran y así ellos pudiesen heredar sus propiedades a sus esposas e hijos.