Este fin de semana fue demoledor, de espanto y nada tiene que ver el pasado.
Relación de hechos: Yeidckol demandada por su propio partido por defraudar; el gobierno federal arremete no sólo contra periodistas y medios sino ahora con activistas en redes sociales; se desenmascara a un partido político como el Verde por ser un mercenario electoral; amlo es abucheado en sus recientes giras y se le piden explicaciones que no dà; tiradero de cadàveres (10 cuerpos) en el norte de la República, Sonora, afuera de Ciudad Caborca; una Secretaria de Estado y su esposo son exhibidos bajo sospechas de enriquecimiento inexplicable; un sicario como “el marro” José Antonio Yepez amenaza y desafía al Ejecutivo Federal; se multiplican las “caravanas” ciudadanas en todo el país manifestando su desacuerdo con las políticas públicas, incluso la aprobación del presidente disminuye aceleradamente; se registra un número impresionante de muertes por coronavirus, solo este domingo mil 44 personas mientras le gobierno no atina ni en el color del semáforo; se da a conocer un evento truqueado en un hospital de Morelos donde nos hacen creer que el presidente observa de qué manera atienden a un enfermo de coronavirus ( ninguno, en absoluto, cumple las normas y protocolos sanitarios más elementales); un custodio tirotea en plena calle en Tuxtla Gutiérrez a un ciudadano en Chiapas involucrando a la hija del gobernador. Y todo esto en pocas horas en un país que presume normalidad, transparencia, honestidad. Pero el colmo es haber escuchado al presidente mentir abiertamente en el caso del “Culiacanzo”, veamos, en octubre del 2019, capturan al Ovidio Guzman y sorpresivamente, luego de que le permiten hacer llamadas telefónicas, lo dejan en libertad, es mismo mes, ante la opinión pública Alfonso Durazo declaró que “los funcionarios del gabinete de seguridad ACORDAMOS SUSPENDER dichas acciones”, más tarde el presidente señaló “LA DECISIÓN LA TOMÓ EL GABINETE DE SEGURIDAD de manera conjunta, colegiada, los secretarios, repito, de la Defensa, de Marina, se Seguridad Pública. Yo RESPALDE esa postura”. Luego en la mañanera amlo afirmó “YO NO ESTABA INFORMADO, NO ME INFORMAN EN ESTOS CASOS”. En el mes de junio del 2020 el Ejecutivo Federal dice “YO ORDENE QUE SE DETUVIERA ESE OPERATIVO Y QUE SE DEJARA EN LIBERTAD A ESTE PRESUNTO DELINCUENTE”. Con todo esto me pregunto, en dónde estamos parados, hacia dónde nos dirigimos, por qué no se cumple con la ley, qué hará la Suprema Corte de Justicia de la Nación ante la confesión del presidente que dejando en libertad a Ovidio podría incurrir en comisión de delitos, complicidad y violación a los preceptos de la Constitución que protestó hacer cumplir, por qué no está arraigada Yeidckol, por qué nos hemos convertido en este momento en el país con mayor número de muertos diarios por coronavirus cuando ya teníamos antecedentes y experiencias internacionales para frenar a la
pandemia? Y aquí están expuestos datos fríos, reales, vigentes, no son interpretaciones y no podríamos aceptar justificaciones tan primitivas a que todo se debe al pasado o es una estrategia nociva de los conservadores. Deberíamos estar muy preocupados, ocupados, atentos y actuantes. Lo dijo de frente, estamos a la deriva y el panorama es sobrecogedor. Que los incondicionales de la 4aT más tarde no reclamen que no se dieron avisos preventivos, sin fines de ataques ni combate. Que no pretendan hacer creer que cualquier tipo de análisis es producto de comunicadores sin escrúpulos. En este país cabemos todos los mexicanos y los durísimos golpes que está provocando y permitiendo el gobierno nos van a arrastrar a sin distinción a una crisis sin precedentes, tiempo al tiempo.
*Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y TV
*Conductor del programa Va En Serio MexiquenseTV canal 34