Se comenta sólo con (Carlos Ramos Padilla)

Los recientes cambios dentro del gobierno federal dejan un sabor de incertidumbre. Veamos, ha nombrado a un agrónomo al frente de Pemex, a una periodista en Seguridad Nacional, a un arqueólogo en el INSABI, a una maestra de historia para el INEGI, a un diseñador gráfico en SEDATU, una maestra de pedagogía en Bienestar, una licenciada en literatura inglesa para Economía y una experta en temas sobre el comunismo como Tesorera.

Amlo decide movimientos en su equipo cercano luego de la salida de Alfonso Romo. Tatiana Clouthier a la Secretaria de Economía; Ana Laura López Bautista, coordinadora de Puertos y Marina; Galia Borja Gómez, al Banco de México; Elvira Concheiro, Tesorera de la Federación; y, Graciela Márquez Colin al INEGI. Sólo mujeres y después del también reciente nombramiento de Rosa Icela Rodriguez como Secretaria de Seguridad.

Es verdad y es en serio, la pandemia se está multiplicando, no importa si le dicen segundo o tercer rebote o si continúan las extraviadas voces que indican que rodó es mentira y 7na conspiración. México es el único país en donde el color naranja tiene muchas tonalidades y eso más que una burla es un acto criminal porque no se está protegiendo a la sociedad, sino se está jugando a la política, esa que operan desde Palacio Nacional. Esa manipulación que nos manda a darnos abrazos y besos.

Se atribuye a John Edgar Hoover, quien fuera el primer director de la oficina federal de investigaciones de Estados Unidos la siguiente frase “entre la lealtad y la inteligencia me quedo con la lealtad” y  concuerdo con ello porque con esto se involucra la fidelidad y el honor. Y una persona que carezca de estos elementos además de la gratitud y la memoria esta hueco y nunca será ejemplo. El lado contrario pero que se da es la traición,

Otro que se va ya disgusto, a decir verdad nunca cumplió las funciones estratégicas de una oficina que antes sí era poderosa. Recordemos que en alguna ocasión el propio amlo, antes de ser presidente, calificó al sr Romo como un personaje “corrupto”, como acostumbraba calificar a los empresarios de este país metiéndolos a todos en el concepto de “cuello blanco”.

Hasta hoy, hasta este momento no hay vacuna contra el COVID 19. Podemos hablar de experimentaciones en laboratorio no de resultados aceptables y tangibles por ello no comprendo como un gobierno como el nuestro puede prometer la distribución y aplicación de este preventivo específicamente en el mes de diciembre. Tendrían que estar dispuestos a revisar y aprobar un presupuesto emergente en este sentido como también un programa real y honesto de distribución y aplicación.

Lo mejor que nos pudiera pasar en dos años de este gobierno es decir que no se ha hecho nada pero no es así, todos los números son negativos, estamos estancados y por si nos faltara algo la Organización Mundial de la Salud nos sorprende con un regaño público por el pésimo manejo de la pandemia. Nos piden seamos serios.