Los avances democráticos que tanto se relatan han ocurrido en el país, en la Capital de la República siguen siendo solamente un motivo aspiracional.
Y no es que la democracia se haya olvidado de nosotros, pues logramos que el gobernante del Distrito Federal fuera elegido por votación mayoritaria, y su territorio dejara de ser un simple departamento, como la mas pura expresión del centralismo mexicano. Hasta ahora los habitantes del Distrito Federal tenemos la facultad de elegir a nuestros gobernantes y a quienes nos representan en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, pero no es suficiente para que consideremos haber adquirido la mayoría de edad en eso que conocemos como democracia. Hace tiempo que se discute en foros, simposios, conferencias, y en los medios de comunicación, el derecho de los capitalinos de contar con una constitución propia, pero hasta ahora no ha pasado del tinte democrático en los discursos.
Una vez mas nuestros conspicuos senadores nos han dicho a quienes aquí habitamos que ya es la hora de que pasemos al siguiente capítulo y conformemos nuestras propias instituciones gubernativas, lo que quiere decir que por fin habremos de hacer realidad ese tan codiciado anhelo que se nos quedo estacionado en el tiempo. Ha sido el líder parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, Emilio Gamboa Patron, quien ha empujado la resolución que nos otorgaría un nuevo estatus dentro de la conformación de la República, y desde luego derechos plenos ante todos los órganos legislativos del país.
No importa quienes se asuman como voceros de la democracia, porque hasta ahora Mariana Gómez del Campo y Mario Carrillo son quienes han buscado a través de los medios divulgar la noticia, pero lo que podemos afirmar es que esa noticia será buena hasta en tanto tengamos la reforma constitucional en las manos y sea enviada a los congresos estatales para su validación. Pero hay algo que vale la pena señalar con toda responsabilidad, la reforma se dará en los momentos en que se avizora que el Partido de la Revolución Democrática perderá su mayoría en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, y eso quiere decir que la catástrofe seguirá para esa franja de la izquierda que resultó profundamente dañada por los sucesos de Iguala donde perdieron la vida seis estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, y desaparecieron 43 mas de ellos.
El retraso sufrido por la tan llevada y traída reforma obedece a la conveniencia de quienes detentan el poder en La Ciudad de México, pero ante los evidentes casos de corrupción que se han presentado y la presión que han ejercido las otras fuerzas políticas, es que finalmente pareciera que la reforma esta a la vuelta de la esquina. De no ocurrir algo que la retrase nuevamente, este día podrá ser considerado importante para loa capitalinos, pues es la fecha que se impusieron los senadores para otorgarnos esa tan ansiada mayoría de edad. Si ya hay humo blanco como aseguraron Mariana y Mario, podremos decir que finalmente se culmina una etapa más de esa búsqueda incansable de los citadinos por lograr la democratización de la Ciudad de México. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.