Apenas el lunes discutíamos en el programa radiofónico de "51 Minutos", en Radio Capital, conducido por Alejandro Envila, y el siempre talentoso Bernardo Lartigue, acerca del posicionamiento político de Miguel Ángel Mancera como el gran perdedor de la elección que se llevó a cabo en la Ciudad de México donde los candidatos del perredismo fueron un desastre. Y no es que fueran malos como señalan algunos, la realidad es que fueron pésimamente elegidos de entre los diversos cárteles que se estructuraron en las demarcaciones territoriales con la finalidad de controlar los flujos de dinero y los negocios de compra de productos, reparación, mantenimiento, y hasta reglamentos. Para decirlo de otra forma, muchos fueron los mecanismos con los que se dedicaron a saquear las arcas públicas del Distrito Federal desde hace muchos años.
La mayor hazaña lograda por los perredistas ha sido que ahora el señor Mancera estará a merced de la voluntad de los diputados de Morena para la asignación de las partidas presupuestales, porque tendrán mayoría en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Para decirlo de otra forma: le impondrán una camisa de fuerza en el manejo del dinero. Pareciera que eso poco le importa al señor Mancera porque de inmediato dio a conocer sus aspiraciones presidenciales. Ayer la nota fue la afirmación de Miguel Ángel Mancera en el sentido de que buscaría ser candidato presidencial, claro está, aunque no tenga partido y siempre anteponiendo el interés de la Ciudad de México antes que el de sus aspiraciones personales.
Pero dejó en la mesa de la discusión que si pretende ser candidato presidencial, aunque de ahora en adelante la administración de la Ciudad de México le resultará harto difícil porque no tendrá el dinero tal y como se lo han ministrado los perredistas, a su antojo y conveniencia, sino al antojo y conveniencia del señor López Obrador que tendrá mayoría parlamentaria en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. El dirigente nacional del PRD, Carlos Navarrete, dijo que su partido está listo para respaldar tanto a militantes como a personajes externos que expresen su interés por ir por la Presidencia de la República en 2018. O sea que desde ahora anuncia que no tienen candidato y que están dispuestos a negociar.
Y conste que no he dicho que el PRD se venderá al mejor postor, pero no hace falta decirlo porque el posicionamiento del señor Navarrete va en ese sentido, y por ahora el mejor postor es el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, pero en unos meses mas quizá no tenga tanto empuje a causa de que no habrá dinero para seguir haciendo campaña. Carlos Navarrete no termina de asimilar la dolorosa derrota de la elección pasada, pero visualiza que pueden hacer un buen arreglo para llevar al señor Mancera como candidato presidencial, y construir desde ahora la plataforma política que presentarán ante los ciudadanos. Mancera no tiene partido y el PRD no tiene rubores. Puede ser un buen negocio para ambos, pero habrá que esperar a ver que dice Morena y su mayoría, quizá aliado con los demás para quitarle las ganas, y el dinero, a Mancera. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.