Después de la fuga realizada por el presunto preso más peligroso y mas vigilado en la cárcel más segura del país, las cosas se han entrampado no tan solo en el ámbito de lo legal, sino que ha provocado una severa crisis en el sistema penitenciario. Muchas cosas se tendrán que
analizar y otras reordenarse, y seguramente los especialistas tendrán que idear nuevas formas de mantener el estado de derecho y castigar, que ya no readaptar a los sentenciados, porque hombres como el que se evadió hay que aceptar que no tienen readaptación. Sin lugar a dudas Joaquín Guzmán Loera es uno de los hombres más buscados de la historia. Estados Unidos lo ubicó en esa calidad por el daño que presuntamente ha provocado a los consumistas de drogas, que en el vecino del norte alcanza a la quinta parte de su población, es decir a cerca de sesenta millones de hombres y mujeres de todas las edades y condición social.
Algo malo debe haber en nuestro sistema penitenciario que se ha logrado fugar dos veces, pero tampoco podemos asegurar que si lo hubiéramos extraditado a Estados Unidos se hubiera quedado recluido de por vida. Hace dos semanas se fugaron dos peligrosos asesinos, y la cacería fue brutal y violenta. Uno de ellos murió en una refriega y el otro fue reaprehendido. Quizá esa es la diferencia, porque mientras aquí nos hemos tardado quince días en armar un grupo para iniciar la búsqueda, allá reaccionaron de forma inmediata.
Desconozco el número de efectivos que hay en la Policía Federal Preventiva, pero según registros son mas de cuarenta mil y al final de año serán cincuenta y un mil. No es un número menor si comparamos con lo que otros países requieren en cuanto a efectivos militares. El problema es que nuestra circunstancia nos obliga a incrementar el número para enfrentar y confrontar a las bandas delincuenciales que hay que aceptarlo, se han apoderado de gran parte del territorio del país. Eso quiere decir que la cuarta parte de los policías federales estarán destinados a la caza del mayor narcotraficante de la historia del país y del mundo. Por lo pronto el Gobierno Federal anunció el despliegue de diez mil policías federales en 22 estados, y también el gobierno de Estados Unidos hará lo propio porque el capo acumula más de diez causas legales en su contra, las autoridades policiales aseguraron que también participarían en su búsqueda.
Con esto se mantiene como el hombre más buscado en la historia de ambos países y quizá del mundo. ¿Cuanto nos costara este despliegue a los mexicanos? Según estadísticas el rango salarial actualmente mantiene 182 categorías, pero haciendo un estimado medio ronda los setenta mil pesos. Esto quiere decir que el gasto mensual salarial por el despliegue de fuerzas federales será del orden de los setecientos millones de pesos, a lo que habrá que adicionar los gastos de movilización y alimentos. ¿Quién paga? Nosotros. Ese es el costo de la ineficiencia para mantenerlo tras las rejas. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.