Julio Boltvinik Kalinka es un afamado maestro egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México, El Colegio de México, la Universidad de East Anglia, el Centro
de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social de Occidente, y doctor honoris causa del Colegio de Postgraduados de México. Con estos blasones académicos podemos decir que es uno de los mejores profesores y especialistas que tiene este país y del cual deberíamos vanagloriarnos.
“Los 32 coordinadores estatales y los 264 regionales que sustituirán a los más de 500 delegados federales y sus oficinas en los estados, fungirán como vigilantes del presupuesto federal y también buscarán consolidar el proyecto de Morena a través de funcionarios ligados a esa fuerza política y con arraigo en la entidad que corresponda”. “A la luz de los duartes” y similares en este país, parece razonable, no está mal que haya un emisario federal, pero se puede volver corrupto en un ratito, basta una visita del narco poderoso que le haga la oferta de plata o plomo, y ahí se acaba la honestidad, señaló Julio Boltvinik.
Pero Andrés Manuel López Obrador sigue señalando a los gobernadores que la nueva figura solamente responde al plan de austeridad de su gobierno para adelgazar la nómina de las delegaciones. Sin lugar a dudas los incautos como el ahora presidente de la Conago, Manuel Velasco Coello, gobernador de Chiapas, seguirán elogiando el modelo de austeridad que les ha platicado el presidente electo, misma que desapareció de inmediato cuando fue Jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
No podemos cerrar los ojos ante la tentación autoritaria y populista que ha venido construyendo el tabasqueño con sus desplantes que violentarían el Pacto Federal y convertiría a este país en un modelo centralista en la práctica, aunque en la letra de la ley sigan existiendo las disposiciones del Pacto Federal. “Poderoso Caballero es Don Dinero”, señala el adagio popular, y será la principal arma para someter a los gobernadores y hacer crecer a quienes responderán solamente a sus instrucciones y no a los principios de ese Pacto Federal que nos ha otorgado la institucionalidad que detentamos.
Por lo pronto, Jaime Rodríguez, gobernador de Nuevo León, encabezó a quienes señalaron que la preocupación sobre los nuevos delegados fue una constante, y anotó puntualmente que “Andrés Manuel López Obrador no fue claro en el rol que tendrán en las entidades. Le cuestionamos varias veces eso, es un tema no explicado todavía. Hay dudas respecto a qué van a hacer y cómo van a estar”. Si de algo podemos estar seguros los mexicanos, es que el tabasqueño genera más dudas que certezas en cuanto a las atribuciones de esos presuntos hombres y mujeres que se encargarán de decidir el destino del dinero federal en las entidades federativas.
El problema es que cada quien va por su lado, y la institucionalidad de reconocer a Manuel Velasco Coello como el hombre que encabeza las negociaciones con el ahora presidente electo, pudiera convertirse en una catástrofe que lamentaremos los mexicanos ante la eventualidad de que tengamos que regresar a los tiempos del partido hegemónico, con lo que podemos estar seguros que morirá la democracia mexicana. Así de simple el escenario catastrófico que acecha al país según las predicciones de Julio Voltvinik Kalinca. Al tiempo.