Ineptitud y corrupción

Mucho habló Andres Manuel López Obrador en todos los rincones del país acerca de la ineptitud y la corrupcion que presuntamente distinguió a los gobiernos encabezados por sus antecesores. Lanzó acusaciones en cada poblado, en cada villa, en cada ciudad, en los parajes en que se
detenía, aunque hubiera pocos asistentes. Así fue construyendo el mito del hombre que diseñaría un nuevo destino para el país, donde no existiera la corrupcion, ni las componendas, y mucho menos los negocios al amparo del poder. Hoy por desgracia, muchos lamentan haberlo elegido.

Treinta millones de personas creyeron en su palabra, porque prometió lo que nunca cumplirá, ya que su principal ambición no es el bienestar de los mexicanos, sino la utilización del poder para enriquecer a esa caterva de hombres y mujeres que se adhirieron a su movimiento como una forma de alcanzar algo que siempre ambicionaron y que nunca tuvieron: poder y dinero. Eso explica el éxito de la mal llamada Cuarta Transformación, que se nutrió de los desechos sociales que no tuvieron éxito en los partidos en que militaron durante tanto tiempo.

Si de algo podemos estar ciertos los mexicanos es de la ineficiencia de quienes encabezan la mal llamada 4T, porque hasta ahora lo único o que han entregado al país es el caos, la ineptitud y la corrupcion como principales resultados del desastroso gobierno que encabeza ese hombre que pululó por todos lados sembrando el odio y acusando de corruptos a tiros y troyanos, aunque su paso por el Gobierno del Distrito Federal haya estado marcado por el cuantioso hurto de los caudales públicos.

El plantón de barrenderos que organizó para mantenerlos en el Zócalo de la Ciudad de México, le redituó un premio de cuatrocientos siente millones de pesos que le entregó Marcelo Ebrard Casaubón, quien iba acompañado de Joel Ortega Cuevas, en Ixtapaluca, Estado de México, donde realizó una parada para esperar a quienes le llevaban el premio que Manuel Camacho Solis decidió entregarle sin contar con la autorización de Carlos Salinas de Gortari. Así comenzó su carrera de extorsionador, porque se acostumbró a hacerlo en cada poblado con la condición de no hablar mal de los gobernantes locales. Después vendría la estafa de la Línea Dorada donde Mario Delgado fue el principal ejecutor del hurto de treinta y cuatro mil millones de pesos.

Hoy la desgracia está presente en cada momento y en todos los rincones del país, porque sus constantes ocurrencias han costado miles de millones de pesos a los mexicanos que aportamos vía impuestos el dinero del que utiliza el Presidente de la República para sus caprichos personales y sus ocurrencias de todos los días. Mientras él propone y dispone, la incertidumbre es el sino de los tiempos, y como lo dijera alguna vez, de lo que se trata es de tener una sociedad empobrecida para que los secuestradores no tengan mercado. Ahí están los registros de sus videos por si pretende negarlo.

La ineptitud y la corrupción propiciada por el Presidente de la República se han convertido en los principales problemas de los mexicanos, porque ha dispuesto delos recursos públicos para sus caprichos personales, con tal de seguir el camino de la regresión a los tiempos en que el inquilino de Palacio todo lo decidía, todo lo autorizaba, y todo lo concentraba. Hasta ahora no existen buenos augurios para el futuro inmediato, ya que de no haber una alianza que le impida seguir manteniendo el control de la Cámara de Diputados, la dictadura estará a la vuelta de la esquina. Así de simple nuestra lamentable circunstancia. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.

Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en el periodismo.