Hace mucho tiempo que algunos especialistas del fenómeno que hemos vivido con la pandemia del Covid-19 han estado alertando acerca de las cifras que ha venido proporcionando el Gobierno Mexicano encabezado por Andres Manuel López Obrador. Y no es un asunto menor porque si de algo
podemos tener la seguridad es que la realidad es distinta a la que nos señalan, porque las mediciones que han llevado organizaciones ciudadanas difieren con mucho de lo que ha venido planteando el gobierno mexicano en ese afán de seguir minimizando los efectos de una estrategia fallida para contener el virus.
La Universidad de Washington ha puesto el dedo en la llaga al afirmar que en México se han registrado un total de seiscientos diecisiete mil ciento veintisiete muertes desde que comenzó la pandemia, y eso quiere decir que la cifra real representaría al menos cuatrocientos mil fallecimientos que no se han reportado de forma oficial de acuerdo a un estudio elaborado por la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, lo que habla de la mendicidad del gobierno encabezado por Andres Manuel López Obrador, el mismo que nos aconsejaba desde el ““Púlpito Mañanero” abrazarnos porque no pasaría nada.
Y es preciso señalar que aparte de que nos han mentido cínicamente, mexico ocupa el tercer lugar de fallecidos en el mundo solamente por debajo de La India y Estados Unidos, donde en realidad se han presentado seiscientas cincuenta y cuatro mil trescientos noventa y cinco, y novecientos cinco mil doscientas ochenta y nueve muertes, respectivamente, y no las cifras que se han anunciado de forma oficial. Y no es algo nuevo, porque seguramente el argumento es evitar que cunda el pánico y la gente prefiera mantenerse aislada antes que se incrementen exponencialmente los decesos, lo que lo obligaría a destinar mucho dinero para ayudar a evitar que se presente una hambruna.
Y esta circunstancia es grave porque nos sitúa en el tercer lugar a nivel mundial en fallecidos, lo que habla de que la estrategia diseñada desde el poder ha sido desastrosa, y eso es el principal indicativo de que los responsables del diseño de políticas para su contención a través de planes de respuesta y recuperación, han fracasado rotundamente, y aunque por el momento Hugo López Gatell siga siendo el vocero Médico, la verdad saldrá a flote de una u otra forma porque este pueblo ya le perdió el miedo al reclamo para señalar puntualmente a los ineficientes, a los ladrones, e incluso para hacer públicos los excesos que ha cometido el Presidente de la República.
Hasta ahora la mejor forma de mantener el engaño es que muchas muertes no se informan porque solamente se toma la contabilidad que se realiza en los hospitales, y el señor Andres Manuel López Obrador sigue ocultando las cifras para evitar ser sometido al escarnio popular y a la ira de los familiares de quienes han muerto por falta de medicamentos en los diversos hospitales gubernamentales. Y hay que decirlo con todas sus letras, así como condenó a muerte a los niños con Cáncer al quitarles sus medicamentos, lo mismo ha ocurrido en los hospitales públicos porque tampoco existen, es más, ni siquiera para los médicos que están en primera línea.
El Presidente de la República sabe que el desgaste de su administración es brutal, y que ha perdido mucho en cuanto a credibilidad se refiere, pero está dispuesto a lo que sea con tal de no perder la elección interna porque los últimos tres años de su gobierno se convertirían en un infierno. De cualquier forma el rumbo de su destino como mandatario camina en ese sentido, porque hasta ahora la mayor parte de los mexicanos han manifestado de una u otra forma su inconformidad con los resultados de su administración. Las encuestas que hasta ahora se han dado a conocer en cuanto a preferencias electorales hablan del derrumbe de la mal llamada Cuarta Transformación, y eso quiere decir que los siguientes años pueden convertirse en un infierno para Lopez Obrador con un Congreso adverso. Así de simple. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en el periodismo.