Sin lugar a dudas, Alejandro Moreno ha sido uno de los peores dirigentes que ha tenido el Partido Revolucionario Institucional, y todavía quiere permanecer
indefinidamente al frente de la otrora aplanadora, seguramente para terminar de enterrar a los despojos en los que hasta ahora se ha convertido. Lo peor que le pudo haber pasado a los militantes del tricolor es haber creído que el señor Moreno los volvería a encumbrar como se los prometió, pero hasta ahora todos indica que ha sido sometido por el propio Presidente de la República que hasta ahora le sigue dictando lo que debe hacer.
Por lo pronto, la Agrupación Frente Nacional “Democracia y Justicia Social” ha puesto el dedo en la llaga para hacer un llamado a los militantes de todas regiones del país a efecto de que se realice de manera inmediata la renovación completa del Comité Ejecutivo Nacional, ya que lo único que ha conseguido el actual dirigente es llevar al partido a una severa crisis de graves consecuencias a causa de su posicionamiento de obedecer los dictados del inquilino de Palacio, quien se regodea con defenestrar a su militancia y burlarse de las demás alicaídas fuerzas políticas.
José Encarnación Alfaro ha sido un militante de muchos años, y todo el tiempo se la ha pasado intentando recomponer estructuras y formar nuevos cuadros con la esperanza de revivir los tiempos en los que la organización era la principal fuerza política del país, y que ahora no es más que un remedo de satélite del Movimiento de Regeneración Nacional que obedece las consignas presidenciales, y depende del humor con que se levante para entender la circunstancia del momento y hacer declaraciones que nada tienen que ver con la reorganización de la otrora aplanadora.
Movimiento Líder encabezado por Alfaro, Plataforma PRI encabezada por Fernando Lerdo de Tejada, y Alianza Generacional, cuyo líder es José Ramón Martell, un militante de muchos años, se dieron a la tarea de convocar a los dirigentes históricos que ha tenido el tricolor, además de excandidatos que decidan sumarse a la lucha por redefinir el rumbo de la otrora aplanadora electoral con la finalidad de evitar en lo sucesivo que siga la dominación de los intereses particulares que hasta ahora le han marcado el incierto rumbo que ha tomado el PRI.
El reclamo principal es que hasta ahora la dirigencia nacional no ha podido cumplir con su responsabilidad de ganar elecciones, y lo peor de todo es que ahora se mantiene una visión patrimonialista a cargo de Alejandro Moreno, que hasta ahora sigue siendo considerado como uno de los peores dirigentes de la historia del tricolor. Sin lugar a dudas, a la militancia priista le ha hecho falta un liderazgo cohesionado que promueva una reorganización interna y organice una asamblea en la que se sienten las bases de un partido moderno, con visión de futuro, y que esquematice el modelo de país que quieren los mexicanos.
Si de algo podemos tener certeza los mexicanos, es que el Revolucionario Institucional, con todo y su desgaste y empequeñecimiento orgánico todavía puede dar la batalla para alcanzar la conformación de una alianza que verdaderamente sirva para detener la intentona comunista populista que hasta ahora ha impuesto Andres Manuel López Obrador. El mercado electoral de este país es amplio y variado, pero hasta entonces no existan motivos y propuestas en que la gente crea, el Movimiento de Regeneración Nacional con todas sus fallas seguirá vigente, y el siguiente paso de López Obrador será clavar la rumba del último heredero de la etapa de la Revolución Mexicana. Al tiempo.
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Lic. En Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Instituto Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.