En una de sus conferencias mañaneras en Palacio Nacional, una valiente mujer cuestionó al Presidente de la República,
señalándoles que existe inequidad en aquellos periodistas que no dejan entrar a las conferencias mañaneras, lo que habla de un proceso de discriminación. Y tiene toda la razón, porque cuando yo intento acudir a varias de ellas simplemente me señaló que no podía entrar porque el Vocero Presidencial, que se llama Jesús Ramirez Cuevas, el mismo que fue a pedir mi salida de EfecktoTV, no había autorizado dicha presencia. .
Y claro que los periodistas exitosos no le caemos bien el Presidente de la República, porque en muchas veces lo hemos reseñado como lo que es, un simple testaferro de las grandes bandas del crimen organizado, y un tirano en ciernes desde que decidió que muchos periodistas que saliéramos de las empresas en las que trabajamos durante muchos años, y la consigna era que los periodistas críticos tendrían que sumarse a las disposiciones del vocero presidencial.
Al mismo que yo mande a freír espárragos, porque la libertad de expresión tiene que estar en todos los rincones del poder público, y no en las ganas de un sujeto que ni periodista es, pero que le lame los huevos al inquilino de Palacio Nacional. Porque los periodistas somos aquellos que todos los días hacemos del conocimiento de nuestros públicos, lo que ocurre en el país y en el resto del mundo.
Durante diecisiete años trabajé en una empresa a la que me entregué en cuerpo y alma desde que trabajábamos en los ladrillos de la construcción de lo que después sería Capital Media, y que ayudara para lograr construir un emporio de medios de comunicación. Por cierto, cuando Jesús Ramírez Cuevas pidió mi salida, los dueños, esos que tanto me felicitaban por mi trabajo radiofónico y televisivo, además de supervisar las ediciones periodísticas.
Pero como dicen por ahí, todo lo que comienza termina, y así se complementa la historia cuando después de tres visitas de Jesús Ramírez Cuevas, Luis Maccise me llamo por teléfono para señalarme que ese día no saldría en noticiero. Ahí mismo comprendí que aquellos que tanto te felicitaban y lisonjeaban por la calidad de tu trabajo, son los mismos que te colocaban la soga al cuello.
Pero ese veto que se ha impuesto a muchos de los periodistas de este país, estará abierto en cuanto termine el periodo presidencial de Andrés Manuel López Obrador, y cada uno de nosotros será responsable de lo que quieran decir y reseñar cómo vivimos las cosas durante uno. de los sexenios más oscuros en el devenir histórico de esta nación. El juicio de la historia lo escribiremos los periodistas. Así de sencillo. Al tiempo.
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Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septién. Conferenciante. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.