El camino elegido por los liderazgos radicales que encabezan las facciones magisteriales aglutinadas en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación ha significado una grave equivocación. El ánimo de confrontación que han generado en muchas de las organizaciones de las comunidades con alto grado de marginación en la Costa Chica, la región de La Montaña y parte de la Tierra Caliente, ha sido manifiesto y aprovechado por quienes las encabezan para retar a las estructuras gubernamentales, al grado de advertir que de no ceder en sus pretensiones pasarán a otra forma de presión, que no tiene otro significado que el utilizamiento de las armas.
La tradición de los movimientos armados de los años sesenta y setenta del siglo pasado encabezados por Jesús Araujo, Blas Vergara, Genaro Vázquez Rojas y Lucio Cabañas, quienes iniciaran la conformación del Movimiento Cívico Guerrerense, sigue presente en la mente de muchos de esos liderazgos quienes además tienen la aspiración de emular a sus antecesores como la única vía, desde su muy particular punto de vista, para iniciar la reivindicación de los empobrecidos habitantes de las olvidadas comunidades de la agreste serranía guerrerense. Los maestros han sido pilares fundamentales de esa tradición, por eso es que los miembros de la CNTE en el suriano estado radicalizan siempre sus acciones para arrancar prebendas a las estructuras gubernamentales mediante la presión, los paros, bloqueos y las tomas de carreteras.
Ahora la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) ha entrado en una etapa de análisis de la circunstancia en que se ha desenvuelto el movimiento, y sus principales dirigentes han decidido deponer la actitud de confrontación hacia el Gobierno Federal negociando con la diputación local perredista una iniciativa de Ley Estatal de Educación que no contravenga la reforma constitucional votada por el Congreso Permanente del país. El propio Gonzalo Juárez Ocampo, dirigente del magisterio disidente explicó que la iniciativa contiene sus principales demandas y no contraviene los contenidos de la federal.
Seguramente los disidentes han entendido que en el camino de la confrontación los que saldrán perdiendo serán los maestros, la organización y sus liderazgos, ya que está latente el riesgo de que el Gobierno Federal decida continuar con la estricta aplicación de la ley y muchos vayan a parar a la cárcel. Con toda seguridad habrán entendido también que el utilizamiento de los contingentes de las policías comunitarias contraviene la legislación federal en materia de armas de fuego y explosivos, y que el Estado Mexicano es quien cuenta con la potestad de la violencia institucionalizada, por lo que el discurso de la represión no encontrará eco en la mayor parte de los mexicanos. Más vale un mal arreglo que un buen pleito. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.