LA CNTE Y EL PREMIO A LOS ESFUERZOS

sinpunto

En este país que anda de cabeza pareciera que las cosas están ocurriendo al revés, porque después de lo que hemos visto en los últimos meses, la esperanza de aquellos que pensábamos que un cambio en el partido en el gobierno nos beneficiaría y que recuperaríamos ese estado de derecho que tanto añoramos, parece disiparse.

Hace mucho tiempo que la normalidad dejó de ser la característica principal del quehacer gubernamental, y que la aplicación de la ley se ha vuelto una simple referencia del pasado, ese mismo que muchos pretendieron y lograron convertirlo en la mejor muestra del autoritarismo de la historia política de este país.

Hechos como el Movimiento de 1968 y el “Halconazo” de 1971 se han vuelto íconos del exceso gubernamental porque así lo han alcanzado aquellos que supieron martirizarse aunque no hayan participado directamente en los hechos. Curiosamente los excesos provocados por la turba enardecida de esos movimientos, como la quema de autobuses, la destrucción de instalaciones, el daño a bienes de la nación, el terror como muestra de que se estaba dispuesto a todo, y la participación comprobada de agentes extranjeros tratando de desestabilizar al país, han pasado a segundo término. No se trata de justificar esa parte de la historia negra del ejercicio gubernamental, pero insisto, el silencio oficial ha permitido la creación de mitos que mucho daño han provocado al país.

Por otro lado, me parece deleznable que desde las instancias oficiales se proteja a delincuentes simplemente porque atentan contra el Gobierno Federal. Mucho tendrá que responder el líder de la bancada en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Manuel Granados, por haber permitido que aquellos que atentan gravemente contra las instituciones entren y salgan de la cárcel, lo que habla de su pequeñez política y su mendicidad partidista. Lo mismo ocurrió con los lamentables hechos que ha realizado y sigue realizando la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que aunque a muchos no les guste, ha mostrado la pequeñez y la minoría de edad de un partido en el poder que pretende que la Capital de la República tenga su propia Constitución, y exigir un fondo de capitalidad, sin siquiera intentar proteger las instalaciones federales, que fueron agresivamente atacadas por los maestros, por cierto, militantes del Partido de la Revolución Democrática.

Resulta aberrante que la dirigencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación haya arrancado en Oaxaca, donde el Gobernador Gabino Cue les sirve solamente de “tapete”, el proceso para otorgar ascensos y cambios de plazas sólo para los maestros que participaron en las marchas, los bloqueos y el plantón en la Ciudad de México. Los méritos para quienes deseen alcanzar plazas de director o supervisor de secundaria, además de cambiar de zona, es acreditar que participaron en el 80 por ciento de las movilizaciones que se realizaron en la capital del país. Si eso lo permite el gobierno oaxaqueño, es porque insisto, ha demostrado que es el tapete favorito de la dirigencia de la CNTE. Hace unos días los legisladores dispusieron que el control de las plazas corresponda a las autoridades federales, por lo que se avizora un nuevo conflicto, cuyo campo de batalla seguirá siendo la Capital de la República. Pobre México. Pobres niños. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.