Oaxaca es el estado que presenta mayor atraso en el país. Este atraso no es solamente en el aspecto económico, sino en casi todos los rubros del desarrollo humano. Y no es que carezca de potencial para trasladarse del otro lado de las estimaciones, el problema es que desde hace muchos años presenta una disfuncionalidad brutal en cuanto a las
instituciones gubernativas, y en lo que corresponde a los integrantes de la fuerza magisterial. Aparte de ello podemos decir que la corrupción de casi todos sus gobernantes ha sido constante, y digo casi porque no me atrevería a señalar que han sido todos, pero creo que desde Benito Juárez todos los que han detentado el poder en el estado han estado cortados por la misma tijera.
Claro está que muchos de los actuales políticos pretenderán que yo rectifique mi percepción, pero después de tantos años de observar los acontecimientos, me queda claro que los políticos de Oaxaca tienen dos grandes problemas: corrupción e ineficiencia. Por lo que corresponde al actual, Gabino Cue Monteagudo, creo que la ineficiencia está por encima de todo, aunque también ha acumulado un caudal que le permitirá vivir sin sobresaltos el resto de su vida. El grave problema del señor Cue es el pavor que le tiene al gremio magisterial que un día lo amenaza y los demás también, y cada vez que eso ocurre pareciera que le da por esconderse en lo más recóndito del Palacio de Gobierno para que no lo encuentren y lo agredan. También los policías ya le tomaron la medida, y no tan sólo realizan paros, sino que operan de la misma forma delincuencial que lo hacen los maestros y no existe nadie que imponga el orden. Parece que ahora las policías responden a los intereses del criminal Rubén Núñez Ginés.
Para colmo de males, la Federación deja a los niños oaxaqueños en el más completo de los abandonos. No sé sí lo que dijo el titular de Educación Pública haya sido vertido a título personal o tenga algo que ver una decisión de Estado. Porque si fue a título personal para sacudirse la estigma de ineficiente, ha dejado de ser útil al presidente Enrique Peña Nieto. "Creo que la Reforma Educativa es mucho más que lograr que un estado que tiene 34 años en resistencia se asimile inmediatamente a la ley. Lo digo con toda franqueza, porque ellos no están defendiendo derechos, están defendiendo interés". Ni más ni menos esas fueron sus palabras. Para decirlo mejor, el señor Chuayffet ha decidido abandonar la plaza que tantos problemas le ha dado al país.
Siempre lo considere un maestro respetable y pensé que tenía los tamaños para lograr lo que le encargó el Presidente de la Republica. Me parece que la actitud contemplativa que anunció señalando que toda la operación la manejan los gobiernos estatales porque desde 1992 se firmó el acuerdo de descentralización, es una forma de deshacerse del problema. Asegurar que a el solamente le corresponde distribuir los recursos federales para los estados y normar la educación, es abdicar de esa responsabilidad histórica que le confirió el presidente. Chuayffet no puede enviar dinero a ningún lado sin responsabilizar a los gobernadores de su destino, y menos a un gobernador timorato como Gabino Cue, que en mala hora eligieron los oaxaqueños. Su responsabilidad es velar por la correcta aplicación, y porque se aplique la ley y los descuentos a quienes vandalizan y no trabajan. Si no sirve, para lo qué le encargaron, tendrá que dejar que venga otro que estatura. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.