Posicionamiento de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, A. C. (ANPERT) en el caso de los
ataques del poder Ejecutivo Federal en contra de la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña Hernández.
¿Qué nos podemos esperar las y los demás?
Ésta es la gran pregunta entre quienes, desde la vida pública, periodística, académica o legal, hemos señalado en voz alta el desastre que nos significa este gobierno.
¿Qué nos espera? Si a una mujer, una figura de la estatura de la SCJN -como lo es la ministra Norma Piña Hernández-, aunado a su calidad de presidenta de la Corte, la han llevado de manera simbólica a la hoguera para ser quemada, tan sólo por ser la voz de la resistencia ante las oleadas golpistas de un presidente y sus tribus.
Ni la ministra Norma Piña, ni ningún mexicano o mexicana, deben ser expuestos por la iniciativa de un mandatario que -desde cualquier tribuna-, empuja la idea de que cualquiera que no piense como él puede ser objeto de ataques.
El odio tiene origen y su propagador tiene nombre y cargo; hoy es jugar con símbolos que se incineran y las manecillas del reloj para que alguien lleve a cabo la obra sangrienta… es sólo cuestión de tiempo y eso en México lo sabemos: ya no hay espacio para el asombro ¡todo puede ocurrir!
En la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT) nos pronunciamos enérgicamente en contra de este tipo de expresiones violentas, que de ninguna manera son fatuas; atacar verbalmente a la ministra presidenta, Norma Piña desde el “púlpito” de las mañaneras y abrir la puerta para que las hordas le prendan fuego a una figura de cartón que representa a la mujer a todas luces incómoda para palacio nacional, deben ser reprobadas por todos los sectores de la sociedad. Y con base en lo anterior no debemos olvidar que a los asesinatos de colegas periodistas en este sexenio, lo sabemos bien, fue el máximo poder quien abrió la puerta para que nos “cazaran”.
La ANPERT, en su calidad de organismo colegiado integrado por periodistas libres, rechaza ésta y cualquier expresión de violencia verbal; la barbarie es inaceptable en nuestro país.
Hoy, las instituciones más recias y necesarias del México nos necesitan, la ministra Norma Piña debe ser respetada por lo que representa, pero sobre todo, porque se trata de una mujer valiente, una mexicana digna que simboliza la moneda más escasa y difícil de encontrar entre el funcionariado público del actual gobierno federal: la moneda de la INTEGRIDAD.
¡La ANPERT abraza y respalda a mujeres y hombres que se la juegan por México!
Atentamente:
ACADEMIA NACIONAL DE PERIODISTAS DE RADIO Y TELEVISIÓN
(ANPERT)