Entresemana (Moisés Sánchez Limón)

Maestro y dueño del registro de la industria de la protesta que por lo menos en las últimas tres décadas le permitió vivir desahogadamente como un vulgar neoliberal y aspiracionista, hasta encumbrarse y vivir en Palacio, Su Alteza Serenísima Andrés Manuel ha sido como la humedad, filtrándose en todos

¡Fórmense!, uno por uno que para todos tiene el licenciado presidente. ¿Quieren que se vaya?, pues agrúpense y duro en las urnas que se prevé instalará, el año venidero, el perverso árbitro electoral para la revocación de mandato.

Don Andrés nunca pierde, mínimo empata y, en la paráfrasis del filósofo de Siempre en Domingo: ¡Aún hay más!

Así, en esa moda que irrumpió en la pasarela política con la llamada 4T el 1 de diciembre de 2018, levantar una encuesta en la esquina de cualquier

La voluntad del Duce Andrés Manuel se ha cumplido, a pie juntillas, en la bancada de la mayoría morena en Cámara de Diputados la LXIV legislatura que está por fenecer el último día de agosto próximo.

La vida política del Duce Andrés Manuel está salpicada de claroscuros, verdades a medias y mentiras burdas, deslealtades y traiciones, ambiciones disfrazadas de patrioterismo, la politiquería como dinamo de la industria de la protesta que le permitió vivir con desahogo sin dar golpe, un millonario en

En esto del distractor llamado Pegasus ¿qué le parece si conjugamos el verbo espiar y concluimos con el verbo impune? 

El tema del espionaje político es viejo, tanto que Su Alteza Serenísima lo conoció en sus inicios como priista distinguido y aspirante al gobierno de Tabasco