La primer gira de trabajo internacional del titular del ejecutivo, tomó como destino el medio oriente, efectivamente punto geo estratégico del globo terráqueo, los países a visitar son Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Qatar; como en la mayoría
de giras de este tipo, la meta será suscribir una serie de convenios que beneficien a México con cada una de aquellas naciones, en diversas materias como: comercial, energética, educativa, cultural y deportiva.
Sin embargo, el carácter propio de esta visita bien podría situarse estrictamente en el ámbito económico, máxime, si después de la misma el Presidente de la República se hará presente en el foro económico mundial de Davos Suiza, mismo que se realiza anualmente y retoma precisamente los tópicos económicos más trascendentes a nivel mundial y cuya presente edición estará enmarcada por la crisis mundial que trae consigo el desplome de los precios del petróleo.
A cuarenta años de la última visita realizada a esa región, el Gobierno Federal, tiene programado signar 52 convenios de cooperación, entre ellos, el Acuerdo de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones con Emiratos Árabes Unidos o los convenios de Servicios Aéreos con Arabia Saudita y Kuwait, pero sin duda alguna, el tópico obligado de la visita, debe ser el relacionado al aprovechamiento de las energías no renovables (petróleo), donde México debe de aprender de estas naciones donde el 98 por ciento de su actividad económica está basada en éste hidrocarburo y más aún, sentar las bases para posteriormente acordar una estrategia a través del intercambio de información sobre mercados petroleros, que permita a ambas regiones lograr un control y posterior repunte en los precios del mismo.
Luego entonces, he ahí la trascendencia de esta visita, misma que se manifiesta en comenzar a construir un puente de cooperación en el sector energético, en hallar una respuesta en conjunto a un tema que día a día se hará más trascendente, y el fomento a esa próxima postura sin duda será a través de la firma de otros convenios, precisamente por esto debemos ser atentos al mensaje y las palabras del ejecutivo mencionadas a su llegada a Arabia Saudita: “En México estamos convencidos de que la energía debe ser fuente de crecimiento y no de inestabilidad”.
Finalizo mencionando, en contrario sensu de lo manifestado por varios medios, que en opinión personal, esta gira representa el inicio de una relación con trascendencia y miras energéticas, este sin embargo es el primer paso, y corresponderá dar seguimiento a los acuerdos que hoy se cierren, para en un corto plazo abordar la materia que más interesa a México.