Opinión

SINGLADURA

Sin ánimo de irrespetar al público lector de este espacio debo confesar que una pesada monotonía se me vino encima cuando comencé a pergeñar estas líneas.  Y todo por culpa de Donald Trump. No hay mucho qué añadir sobre el bisonte que ocupa la Casa Blanca. Es un libreto conocido. Los días y episodios más ríspidos del aún joven

SINGLADURA

Las políticas largamente anunciadas y que empieza a activar el señor Donald Trump, presuntamente para de nueva cuenta hacer grande a Estados Unidos, me han hecho recordar al extinto señor Rafael Caldera, quien se hizo presidente por segunda vez  de Venezuela en 1994.