Por primera vez en la historia de México, habrá presidenta. Las principales contendientes son mujeres y nadie duda que
una de ellas va a llegar a la silla presidencial.
Cuando había presidente, la esposa, sobre todo durante la hegemonía del PRI, era llamada desde el primer momento “primera dama”.
A partir de este 2024 será distinto, ya no habrá “primera dama”, sino presidenta.
¿Qué función le correspondería al esposo?
Por lo pronto y de manera sencilla se le podría llamar “el esposo de la presidenta”. No le quedaría lo de “primer caballero” o “consorte presidente”.
¿A qué tipo de reuniones acompañaría a la presidenta?
En el pasado la “primera dama” se desempeñaba como presidenta honoraria del Programa de Desarrollo Integral de la Familia (DIF), sin percibir ningún sueldo o ingreso.
Esta ocupación desapareció con el triunfo del PAN en 2000 y adquirió otro perfil la esposa. Marta Sahagún se volvió influyente y opinadora política en la administración de Vicente Fox. Margarita Zavala también tenía opinión sobre temas nacionales o de interés para el gobierno. Angélica Rivera aumentó su fama por la adquisición de la “Casa Blanca”.
¿El esposo de la presidenta también llegaría a tener poder, aunque no tenga cargo público?
Independientemente de como se le llame y lo que haga, por experiencias anteriores y presentes, sería ideal que se transparentara su actuación y rindiera cuentas, si fuera necesario.
Y no estaría demás que este criterio aplicara para toda la familia presidencial, para evitar excesos.
Arturo Zárate Vite
Twitter y TikTok: @zarateaz1