El proyecto de resolución de la magistrada Zulema Mosri Gutiérrez, integrante de la sala superior del Tribunal Federal de
Justicia Administrativa, determinó el pago de tres mil 863 pesos para indemnizar a una persona víctima de tortura física.
La agresión ocurrió en 2012, así que, si se divide la cantidad entre los días transcurridos hasta el año pasado, resulta que el monto por día equivale a menos de un peso, menos de lo que cuesta un curita.
No tiene precedente en el mundo esa cantidad. Rompe récord, porque ninguna otra autoridad relacionada con el sistema de justicia, en ningún país, ha llegado al extremo de estimar de esa manera una indemnización por tortura física.
El proyecto de 61 páginas de la magistrada Mosri, aprobado por el TFJA el pasado noviembre, se basó en la descripción de las lesiones que hizo el médico de guardia del penal de máxima seguridad de El Altiplano, en el estado de México, donde la víctima estuvo internada cinco días (por supuesto delito, no grave) y en peritajes que hicieron el tribunal y la parte infractora.
Las pruebas que aportó la víctima fueron desestimadas. Según la autoridad se entregaron a destiempo y no contribuyeron a demostrar que por la tortura se interrumpió su actividad laboral.
Sin embargo, todavía no está dicha la última palabra en este caso porque el afectado presentó amparo indirecto que deberá de resolver el juzgado décimo séptimo en materia administrativa.
Por lo pronto, la magistrada Mosri, quien aspira a ministra, ya sentó precedente en las instancias judiciales, estableció récord mundial.
Arturo Zárate Vite
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