Hace como unos cinco años, tuve que ir a Tlaxcala, ahí contacté a un amigo que es de allí y conoce bien la región, pude observar al entonces gobernador rodeado de guaruras y alejado de la gente porque le molestaba que lo abordaran, en el hotel del centro donde estaba él con unos funcionarios o amigos, los guaruras le exigían a uno que se moviera del sitio porque “estaba el gobernador”, hombre elegante y bien vestido. Como no queríamos tener conflictos, nos movimos y aproveché para decirle a mi amigo que me
diera una vuelta por la ciudad, y así fuimos hasta un sitio pegado a una vía de ferrocarril donde existía uno de los tianguis de la región, y al pasar por esas calles pude observar a muchos hombres que estaban en las banquetas que cuando veían el vehículo desconocido para ellos se metían a las casas y cerraban, pero me llamó mucho la atención de que en las casas, en las ventanas, todas, estaban tapiadas con madera, y al preguntarle a mi amigo sobre ello, me dijo que era la zona de los padrotes y de la trata de personas. Es decir, todos saben cómo opera este asunto y cómo se han escrito historias terribles por parte de algunas mujeres que han sido víctimas de la trata de blancas y de cómo las llevan hasta Estados Unidos y las ponen a “trabajar”, las drogan y las explotan, y cuando ya son viejas o no sirven para el negocio, las dejan o las matan, y en todo esto hay una enorme complicidad de las autoridades con los grupos mafiosos que hacen este brutal y horrible negocio. En los muchos escritos que se han publicado en varios medios de comunicación y revistas, se ha visto esa brutalidad y esa relación entre padrotes, familias especializadas en el “negocio” y la complicidad de las autoridades, y en muchos casos, de los políticos, y cuando veía esto me preguntaba la razón por la que todos saben de donde son los grupos especializados en la trata y prostitución y de cómo secuestran o convencen a las chicas de muchos puntos del país, y nadie hace nada, y se deja el negocio para que muchos políticos y funcionarios, policías, sean los beneficiarios de la explotación de la prostitución.
Con el escándalo generado por el secuestro y asesinato de la jovencita Mara Castilla, tras tomar un taxi Cabify después de convivir con sus amigos en un antro, donde dos adultos le tomaron fotos y videos, y así, la fueron a encontrar asesinada en un motel de Tlaxcala, a donde seguramente la llevaban para incorporarla a la larga lista de jovencitas que son explotadas por los padrotes de Tlaxcala que al parecer gozan de gran organización, y sobre todo, de impunidad y protección para su lucrativo negocio.
Hemos comentados cómo también, en las universidades de paga y confesionales, existen grupos especializados en formar grupos de “acompañantes” de hombres y de mujeres, y que en este sentido, se debería hacer una investigación muy seria, porque de avanzar el tema de las drogas y la prostitución en las escuelas podría ocasionar graves daños y muchas muertes en el país, además de los miles de asesinatos que tenemos que sufrir los mexicanos por la famosa guerra contra el narcotráfico, que no ha resuelto el tema de la violencia y del tráfico de drogas, porque solamente se realizó para dar obediencia a los dictados de los norteamericanos y esperar que ellos ampliaran el enorme negocio de las drogas por medio de su legalización.
Cuando sabemos del tráfico de drogas implementado en los centros educativos, no solamente en la UNAM, sino en todos, incluyendo a las universidades de paga y confesionales, y se sabe del tráfico de personas y prostitución, es necesario poner las alarmas y ver lo que está sucediendo, porque el país está muy destruido y lleno de conflictos y problemas para que éstos fenómenos de descomposición social se generalicen en los centros de estudio. En algunas universidades, por ejemplo, en Oaxaca, todos sabemos que el control políticos y administrativo se realiza por medio de los grupos organizados de porros que controlan las escuelas, protegen la prostitución y la drogadicción, y ellos, a su vez, están protegidos por los ex rectores que se han enriquecido y siguen controlando los centros de estudio y es la razón por la que no se avanza en la reforma real con el cambio y la búsqueda de la excelencia académica, porque en muchos sitios se venden calificaciones por medio de los maestros porros o se busca que se paguen las mismas con “cuerpomático”, en muchas facultades donde los “maestros” se divierte con esa práctica.
En las calles de las ciudades, en las casas especiales donde se promueve la prostitución hay muchas evidencias y se podría entender el entramado de esa poderosa mafia que sigue destrozando vidas de muchas jovencitas y jovencitos en el país, y nadie se explica que siendo una enorme organización donde están metidos políticos, funcionarios, policías, financieros y padrotes no se pueda lograr desmantelar a la misma ya que, además, no hay duda de que esa red está ligada a la red de tráfico de drogas y lavado de dinero en todo el país y en el extranjero. Que la vida de Mara no quede sin castigo pero que sirva para que se realice una limpia en todos lados y se vea el papel que juegan las nuevas empresas de taxis particulares y los antros, y de cómo se han descompuesto y pervertido los centros de estudio por los grupos de traficantes de drogas y por los lenones que operan con total impunidad…