Sin lugar a dudas los maestros aglutinados en la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero piensan que ahora son dueños del estado. Hasta ahora se han comportado como señores de horca y cuchillo porque son los que deciden que pasa con todo lo que tenga que ver con las actividades gubernamentales. Y no es que las
autoridades legalmente constituidas encargadas del orden no tengan la capacidad de imponerlo, sino que el Gobernador Rogelio Ortega no ata ni desata. En mala hora escogieron las hordas perredistas porque lo único que lograron fue acrecentar el conflicto con el timorato e inútil sujeto que reparte culpas por todos lados y nada hace por imponer el orden o por iniciar un proceso de negociación.
Señalar que es necesario que la Procuraduría General de la República deje de mentir, ha sido otro de sus deslices verbales que lo único que genera es la percepción que efectivamente el Gobierno Federal tuvo mucho que ver con la desaparición de los normalistas. No se si el bendito señor haya querido dar a entender eso, o haya sido producto de un "lapsus brutus"como señala en ocasiones el vulgo, pero en cualquiera de las dos circunstancias el señor Ortega muestra y demuestra que fue la peor idiotez que pudieron haber hecho los integrantes del Congreso local, insisto, de mayoría perredista.
Dejando de lado las idioteces cometidas por el gobernador interino, durante el mitin de ayer el señor Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los normalistas desaparecidos, que por cierto no es padre de ninguno y si un especialista de la desestabilización, dejo en claro que no habrá elecciones asegurando que "votar es votar por el crimen organizado". Pero también hay que señalar que no votar es dejar que el crimen organizado que representan la CETEG y los normalistas de Ayotzinapa sigan pensando que ellos pueden mas que el gobierno y terminen con la precaria economía de Guerrero a través de sus deleznables actos de barbarie. Para que lo entendieran quienes estaban vigilando la marcha y la concentración, aseguró que "no habrá elecciones aunque el gobernador y Osorio Chong digan lo contrario, pues el pueblo de Guerrero no lo va a permitir", lo que significó un reto al Estado Mexicano y al Estado de Derecho.
Habra que decir que el señor Felipe de la Cruz es un consumado guerrillero urbano que ha participado en diversas acciones contra las estructuras gubernamentales, y que por mucho que diga que el pueblo de Guerrero no va a permitir que haya elecciones, la mayor parte de los moradores del Suriano estado están hartos de los desplantes de la CETEG y los normalistas, y de no hacer algo pronto los gobiernos Federal y Estatal se puede ocasionar una tragedia a causa del hartazgo de importantes sectores poblacionales que ya se están preparando para confrontar y pagar con la misma moneda de la violencia a maestros y alumnos. Eso es lo que no se debe permitir, y si ocurriera la responsabilidad será del señor Ortega. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.