EL PRD se convirtió en uno de los proyectos más esperanzadores para los sectores desprotegidos del país, y aglutino a esos luchadores sociales que pararon en la cárcel o en el clandestinaje para seguir manteniendo sus ideales, y que operaban de forma dispersa en casi todo el territorio del país. Fue el nacimiento de una nueva época en la que los hombres y mujeres de convicciones cercanas a los postulados del socialismo se unieron en un proyecto común que ahora ha comenzado a languidecer por causa de esa condición humana de ambicionar el acumulamiento de riqueza.
Todas las corrientes de la izquierda mexicana se unieron al propósito de Cuauhtémoc Cárdenas de conformar un partido que concentrara las causas más olvidadas del país. 1989 fue el año emblemático para las izquierdas y producto de la Reforma Política ideada por Jesús Reyes Heroles y promulgada por José López Portillo, que dio la oportunidad para emerger a la institucionalidad a esos grupos que se mantuvieron en el clandestinaje durante muchos años. Pero como siempre ocurre, la perversión de las voluntades provocaron que aquellos que juraron defender las causas de los pobres aprovecharon la circunstancia del poder para enriquecerse y comenzaron a dejar de lado los principios. Eso significó la destrucción de un proyecto aspiracional que aglutinó voluntades porque era distinto en esencia y forma.
Después de lo que hemos observado se puede decir, sin temor a la equivocación, que el Partido de la Revolución Democrática se acerca a su extinción. La detención de Carlos Mateo, hermano del ex Gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, y Víctor Ignacio Hughes Alcocer, Subsecretario de Finanzas y Administración, vuelve a generar una crisis hasta ahora, de inevitables consecuencias electorales para el Partido de la Revolución Democrática. De seguir aflorando los focos de corrupción encabezados por los principales gobernantes y representantes populares del perredismo, será inevitable la extinción. Resulta difícil de creer que mas que buscar una candidatura a las diputaciones federales y locales por parte de quienes fueron Jefes Delegacionales en la Ciudad de México, respondan mas a la búsqueda de fuero para evitar ir a la cárcel después de realizar administraciones desastrosas y enriquecerse de forma grosera e impune.
El problema comienza desde la cabeza, y en el caso que nos ocupa la dirigencia nacional ha sido proclive a proteger las conductas delincuenciales mediante el otorgamiento de fuero a través de candidaturas. Ángel Aguirre Rivero, Andrés Manuel López Obrador, Marcelo Ebrard Cassaubón, Mauricio Toledo, Víctor Hugo Romo, Jesús Valencia, Rubén Escamilla, y muchos otros mas, por citar algunos, están dentro del desprestigiado club de la corrupción que puede provocar la caída electoral del Partido de la Revolución Democrática. No es toda la izquierda, pero hasta ahora la mas fuerte expresión de la izquierda. Pero también hay que señalar que la corrupción no es un asunto nuevo en el PRD, pues muchos de los liderazgos de las distintas corrientes comenzaron a enriquecerse desde que deambulaban por las oficinas del Instituto de Vivienda del Distrito Federal. Por eso afirmo que en el Partido de la Revolución Democrática la protección delincuencial esta a la orden del día. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.