Muchos yerros han cometido los miembros de la corriente dominante en el Partido de la Revolución Democrática. Pareciera que después que Andrés Manuel López Obrador decidiera conformar un nuevo partido, comenzó la crisis de las izquierdas, sobre todo la militante del perredismo. Pero no solo el Sol Azteca es la que ha padecido esta crisis, el tabasqueño se llevó militantes del Partido del Trabajo, Movimiento Ciudadano, y hasta de Nueva Alianza, lo que comprueba que todavía cuenta con el suficiente poder de convocatoria para poner e imponer agenda a quienes se mueven dentro del margen ideológico de la izquierda.
Pese a ello parece que la corriente de "Los Chuchos" no han entendido la gravedad de lo que están viviendo y han asumido el momento coyuntural como muchos de los que han padecido a lo largo de veinticinco años. Quizá porque son la corriente que mas tiempo ha durado en el control del partido, pero a cambio de ello han visto decrecer de forma irreversible la presencia en estados como Baja California Sur, Chiapas, Oaxaca, Sinaloa, Guerrero, y el Distrito Federal, donde por primera vez en dieciocho años pueden perder varias Delegaciones Políticas y diputaciones locales y federales. Para decirlo de otra forma, el perredismo ha entrado en una crisis de imprevisibles consecuencias, y la elección venidera pudiera mostrar el rostro de la adversidad que los mandará al cuarto lugar en las preferencias electorales.
En el recuento de los daños por las decisiones cupulares en la repartición de las candidaturas plurinominales a la Cámara de Diputados resultaron marginados muchos de los que consideraban ocuparían una curul. Marcelo Ebrard Cassaubón pensó que por el hecho de haber sido Jefe de Gobierno de la Ciudad de México tenía ese derecho para blindarlo de la posibilidad de tener que responder penalmente por el brutal fraude cometido en la construcción de la Línea 12 del Metro. El fuero le garantizaba enfrentar un posible proceso penal sin tener que pisar la cárcel, pero al parecer o Los Chuchos decidieron que lo mejor era prescindir de el, o negociaron la posibilidad de quitarlo del camino del Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, en el caso que decida competir por la candidatura a la Presidencia de la República.
Estoy seguro que el señor Ebrard lamentará no haber emigrado a Morena, pero también René Bejarano ni siquiera fue considerado para integrar la lista porque los compromisos de "Los Chuchos" están por encima de cualquier otra cosa. La conclusión de todo es que sabedores del achicamiento del partido, es la hora de aprovechar cualquier resquicio para seguir exprimiendo los últimos beneficios antes que optar por el retiro. Mientras Ebrard y Bejarano lo lamentan, "Los Chuchos" están comenzando a construir el escenario para dar el último de sus golpes económicos: la postulación del señor Miguel Ángel Mancera a la Presidencia de la República. El problema es que nunca segundas partes fueron buenas, y el escenario de su elección a la Jefatura de Gobierno no es el mismo que el que existe en todo el país. De cualquier forma habrá negocio. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.