La peculiaridad de nuestro sistema democrático es que consigna libertades que en ocasiones los propios participantes, y quienes debieran cumplir a cabalidad las leyes electorales, son quienes por desgracia se han convertido en expertos en evadir su letra y sus disposiciones. La especialidad que han adquirido, todos y en todos los partidos, es para dejar de cumplir lo que ofrecen campañas porque hasta ahora en México no hemos logrado hacer realidad la rendición de cuentas. El nicho de los partidos es tan fuerte y arraigado que pese a los graves y brutales actos de Corrupción la gente sigue creyendo en lo que ofrecen y acuden a votar a sus candidatos cuando lo razonable sería que los botaran como una forma de castigo. Hay que decirlo crudamente, no son ellos los culpables, sino nosotros.
Lo peor que le pudiera pasar al gobierno de Enrique Peña Nieto es que la sucesión se le salga de control. Y no es que cause preocupación la posibilidad, pero creo que debiera calmar las ansias locas de algunos de los respetables integrantes del primer círculo, y con ello también atajar la intentona de quienes se han calentado en el lado de enfrente y han externado públicamente que buscarán la candidatura. Esta semana fue anunciada la encuesta que posiciona en primer lugar entre los aspirantes a suceder a Enrique Peña Nieto, a Margarita Gómez del Campo, esposa de Felipe Calderón Hinojosa. En segundo lugar aparece el titular de la Secretaria de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y por ello blanco de los dicterios de quién se asume como el coordinador de campaña y principal interesado, y por consecuencia el Primer Caballero en el caso de que ella resultara electa en 2018.
Claro está que el señor Osorio no ha respondido a la provocación del señor Calderón sabedor de que en su partido existe una regla no escrita que indica "esperar hasta que llega lo que tiene que llegar", así de simple. Son muchas las horas de vuelo que tiene el hombre de Bucareli como para brincar al primer amago del expresidente. Lo mismo ocurrió con Aurelio Nuño, quien llegó para imponer orden en el sistema educativo y para enderezar la nave que dará viabilidad al país dentro de algunos años.
No ha sido fácil enfrentar a esa caterva de delincuentes en que se convirtió la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, pero una vez que se logró terminar con sus privilegios en Oaxaca, surge la voz tronante del prócer tabasqueño, Andrés Manuel López Obrador, prometiendo regresar las prebendas a la CNTE de ganar Morena la gubernatura. Miguel Ángel Mancera sigue adelante con su estrategia mediática y ahora reclama que sea su gobierno quien asigne destino a los terrenos federales cuando se desocupen las terminales 1 y 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Ante las ansias locas de unos, tranquilidad en los integrantes del Gabinete Presidencial. Esa es la diferencia. Ojalá ese calentamiento de motores les alcance cuando tengan que correr en serio. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.