Muchas veces dijo que su principal preocupación serían aquellos que han sido relegados por los gobiernos anteriores de los principales procesos de inclusión en los programas sociales, principalmente en los que se refieren a la canasta básica de la población en situación de pobreza. Es más, presumió
que el los sacaría de ese ostracismo social en el que fueron relegados y que desde la esfera gubernamental serían atendidos para que nunca más padecieran los agobios de no tener al menos un mendrugo de pan para repartirlo entre los integrantes de las familias en situación de pobreza.
La mayor parte de los mexicanos le creyó, y le otorgaron su voto, pero hasta ahora lo único que han recibido a cambio son diversos actos de traición al privilegiar a las huestes de su partido antes que atender los requerimientos de la canasta básica de los hogares más empobrecidos en todas las latitudes de este alicaído país, que por desgracia ha entrado en una vorágine de brutal crecimiento de la pobreza. Para decirlo más claro, no tan solo no atendió a los pobres, sino que los ha multiplicado y condenado a muchos de ellos a los niveles de la mendicidad.
La Comisión Económica para America Latina y el Caribe ha puntualizado que la pandemia, esa que desestimó quien por ahora ocupa la Presidencia de la República, y que de forma irresponsable aconsejaba que nos abrazáramos porque no pasaba nada, aumentó los niveles de pobreza sin precedentes en las últimas décadas e impacta fuertemente en la desigualdad y el empleo. La recomendación que puso en la mesa de la discusión es que el total de personas pobres ascendió a doscientos nueve millones a finales del 2020, es decir, veintidós millones de personas más que el año anterior, por lo que ha pedido la creación de un nuevo Estado de bienestar.
Lo peor de todo es que el Coneval, el organismo que mide los niveles de pobreza en nuestro país, estima un aumento de entre 8.9 y 9.8 millones de personas que no pueden cubrir el gasto de los alimentos básicos a causa de la crisis del COVID 19, esa pandemia que desestimó el,propio Andres Manuel López Obrador y que sigue causando innumerables muertes que según conteos serios alcanza un número superior a los trescientos mil mexicanos, lo que difiere de las cifras oficiales que lo único que buscan es ocultar datos eludiendo su responsabilidad histórica.
Para decirlo más claro, la pandemia ha arrinconado a millones de mexicanos en la mendicidad, y aunque no le guste al tabasqueño, lo único que podemos tener en claro es que condenó a la muerte a infinidad de connacionales a causa de su estúpido empecinamiento por minimizar la gravedad del problema ocultado los daños verdaderos. Los avances que los gobiernos anteriores alcanzaron en materia de desarrollo social han sido avasallados por la estupidez de no encarar el problema de forma adecuada, y cuando los especialistas de su gobierno le mostraron cifras de la magnitud de la tragedia, simplemente le dio vuelta al discurso, y por desgracia es la hora en que no se han adquirido las suficientes vacunas para inocular a toda la población.
Lo peor de todo es que el propio Coneval advirtió que las transferencias monetarias que el señor Lopez realiza con su política social son medidas temporales que no han logrado mitigar los estragos causados por la pandemia en los sectores más vulnerables de la población. En lo personal creo que Andres Manuel López Obrador puede ser acusado en las cortes internacionales por su irresponsable manejo de la pandemia y las muertes que hasta ahora ha causado, que muchos señalan son más del doble de los que se reporta desde el Gobierno Federal. Para decirlo más claro, Andres Manuel López Obrador pudiera haber cometido el delito de genocidio consentido. Así de simple. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50
La mayor parte de los mexicanos le creyó, y le otorgaron su voto, pero hasta ahora lo único que han recibido a cambio son diversos actos de traición al privilegiar a las huestes de su partido antes que atender los requerimientos de la canasta básica de los hogares más empobrecidos en todas las latitudes de este alicaído país, que por desgracia ha entrado en una vorágine de brutal crecimiento de la pobreza. Para decirlo más claro, no tan solo no atendió a los pobres, sino que los ha multiplicado y condenado a muchos de ellos a los niveles de la mendicidad.
La Comisión Económica para America Latina y el Caribe ha puntualizado que la pandemia, esa que desestimó quien por ahora ocupa la Presidencia de la República, y que de forma irresponsable aconsejaba que nos abrazáramos porque no pasaba nada, aumentó los niveles de pobreza sin precedentes en las últimas décadas e impacta fuertemente en la desigualdad y el empleo. La recomendación que puso en la mesa de la discusión es que el total de personas pobres ascendió a doscientos nueve millones a finales del 2020, es decir, veintidós millones de personas más que el año anterior, por lo que ha pedido la creación de un nuevo Estado de bienestar.
Lo peor de todo es que el Coneval, el organismo que mide los niveles de pobreza en nuestro país, estima un aumento de entre 8.9 y 9.8 millones de personas que no pueden cubrir el gasto de los alimentos básicos a causa de la crisis del COVID 19, esa pandemia que desestimó el,propio Andres Manuel López Obrador y que sigue causando innumerables muertes que según conteos serios alcanza un número superior a los trescientos mil mexicanos, lo que difiere de las cifras oficiales que lo único que buscan es ocultar datos eludiendo su responsabilidad histórica.
Para decirlo más claro, la pandemia ha arrinconado a millones de mexicanos en la mendicidad, y aunque no le guste al tabasqueño, lo único que podemos tener en claro es que condenó a la muerte a infinidad de connacionales a causa de su estúpido empecinamiento por minimizar la gravedad del problema ocultado los daños verdaderos. Los avances que los gobiernos anteriores alcanzaron en materia de desarrollo social han sido avasallados por la estupidez de no encarar el problema de forma adecuada, y cuando los especialistas de su gobierno le mostraron cifras de la magnitud de la tragedia, simplemente le dio vuelta al discurso, y por desgracia es la hora en que no se han adquirido las suficientes vacunas para inocular a toda la población.
Lo peor de todo es que el propio Coneval advirtió que las transferencias monetarias que el señor Lopez realiza con su política social son medidas temporales que no han logrado mitigar los estragos causados por la pandemia en los sectores más vulnerables de la población. En lo personal creo que Andres Manuel López Obrador puede ser acusado en las cortes internacionales por su irresponsable manejo de la pandemia y las muertes que hasta ahora ha causado, que muchos señalan son más del doble de los que se reporta desde el Gobierno Federal. Para decirlo más claro, Andres Manuel López Obrador pudiera haber cometido el delito de genocidio consentido. Así de simple. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50