Sin lugar a dudas Carlos Joaquín González es un hombre al que le gusta hacer política y le va bien en ella. Además es una peculiaridad familiar porque su
hermano también fue Gobernador de Quintana Roo. Su relación con el Presidente de la República es cordial y en ocasiones amistosa, pese a que hace cinco años Andrés a Manuel López Obrador apoyó abiertamente a José Luis Pech quien ahora es Senador Electo por el principio de Mayoría Relativa. Hasta ahora ha sido un hombre parco que se ha dedicado de lleno a su funcion senatorial.
Pero como todos los políticos, también tiene aspiraciones y pareciera que está interesado por contender por la Gubernatura de Quintana Roo, pues el pasado once de noviembre se registró en el Movimiento de Regeneración Nacional para contender en la elección interna. Y claro esta que sus aspiraciones son legítimas porque ha sido un hombre congruente y espera que el proceso sea conducido con profesionalismo y responsabilidad porque es fundamental mantener la unidad dentro del partido.
También ha dicho que se debe respetar la militancia, honrar el trabajo político de cada quien y tomar una buena decisión porque el problema no es tanto ganar la elección, sino lograr un buen gobierno y para ello es importante que se seleccionen personas con experiencia probada. También puntualizó que el Movimiento de Regeneración Nacional Padece hoy problemas que son consecuencia de su propio éxito, y tiene que ser muy cuidadoso en la decisión, debido a que con la apertura que realizó el partido en el 2018, provocó que se tenga hoy una gran cantidad de aspirantes con diversas características.
Y mucha razón tiene el señor Pech, por una sencilla circunstancia: la gubernatura de Quintana Roo es la ““joya de la corona”, ya que se ha distinguido por ser uno de los estados más pujantes del país, y sobre todo cuenta con una exponencial riqueza natural que con facilidad puede seguir explotando no tan solo el turismo tradicional como se ha construido en Cancún, Playa del Carmen, y las paradisíacas Islas que hasta ahora abonan a esa riqueza y que puede seguir creciendo.
El Gobernador Carlos Joaquín González ha tenido la calma y tranquilidad para esperar cuál es la decisión que tomarán los partidos que lo postularon hace seis años, y que ganaron gracias al ““efecto del desvalido” por la férrea oposición de Roberto Borge para que fuera candidato a sucederlo. La historia señala que Carlos Joaquin ha sido diferente en proyecto y formas de ejercer el poder. Su mesura le ha generado un amplio respeto en todos los sectores sociales, aunque tampoco ha estado exento de diversos avatares que se han presentado con la pandemia y el cierre de muchos espacios.
Falta mucho por conocer en el camino hacia la renovación poderes en Quintana Roo, y hasta ahora Carlos Joaquín se ha mantenido al margen porque siempre ha dicho que entregará buenos resultados, y al parecer así será porque su sobriedad y su empuje final va en ese sentido. Seguramente su padre estaría muy orgulloso de lo que hasta ahora ha alcanzado después de que su antecesor, Roberto Borge, dejara un desastre de índole administrativo y una sociedad dividida por sus excesos. La mesura de Carlos Joaquín es evidente, y hasta ahora no se ha entrometido en el proceso interno de los partidos políticos, porque seguirá trabajando hasta el último día de su mandato para entregar buenas cuentas a los quintanarroenses. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.