EL Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, señaló que el país crecerá al menos al cinco por ciento en el Producto Interno Bruto. Tiempo
después la Secretaria de Economía Tatiana Clouthier corrigió el dato del Mandatario señalando que a lo mucho se crecerá en un 2.6 del Producto Interno Bruto, cifra mucho menor a la señalada por el inquilino de Palacio Nacional. Pareciera que el mandatario sin darse cuenta sigue viviendo en su inventado mundo de fantasía donde todo es perfecto.
No es gratuito que el escritor francés André Bretón, Padre del surrealismo, declarara un día que Mexico es el país más surrealista del mundo, porque cuando lo visito en 1938 quedó maravillado por la refinada artesanía y quiso encargar a un carpintero una silla artesanal, y fue cuando se dio cuenta que el surrealismo tiende a representar a los deseos del subconsciente y la labor fuera de los límites de la razon. Pero también hubo un episodio durante la visita de Salvador Dali quien comentó que de ninguna manera volvería a México porque no soportaba estar en un país más surrealista que sus pinturas.
Si definiéramos que significa el surrealismo diríamos que fue un movimiento cultural desarrollado tras la Primera Guerra Mundial e identificado como un movimiento artístico y literario que intenta sobrepasar lo real impulsando lo irracional y onírico mediante la expresión automática del pensamiento o del subconsciente. El movimiento es conocido por sus artes visuales y su escritura mezclado a una imaginación inusual. Así, los artistas pintaban imágenes desconcertantes e ilógicas, a menudo con una precisión fotográfica y creando extrañas criaturas de objetos cotidianos y desarrollando técnicas pictóricas que permiten desvelar el subconsciente.
Según señalaba André Bretón, el objetivo era convertir las contradicciones de los sueños y la realidad en una realidad absoluta, una súper realidad. Breton afirmaba que el surrealismo era un movimiento revolucionario, siendo asociado a causas políticas como el comunismo y el anarquismo. El término fue acuñado por Guillaume Apollinaire en 1917, pero no obstante el movimiento surrealista se estableció hasta el año de 1924, cuando el poeta y crítico francés André Breton publicó el “Manifiesto del Surrealismo” en paris.
En 1938 André Breton declaró a México el país más surrealista del mundo, y tenía razón. De ahí que muchos tengamos la concepcion de que este es un país surrealista por causa de aquellos gobernantes que piensan que las ocurrencias pueden ser estrategias de gobierno, como ha sido el caso de Andrés Manuel López Obrador desde su llegada a la Presidencia de la República. El mejor ejemplo de ello es la surrealista rifa del avion presidencial, que no fue rifa y mucho menos se entregó el premio, lo que habla por desgracia del surrealismo obradorista convertido en una lamentable realidad.
En 1938 el propio Breton subrayó que México era realmente un país surrealista porque el surrealismo tiende a representar los deseos del subconsciente, y la labor del instinto fuera de los límites de la razon. El surrealismo creía en la existencia de otra realidad en el pensamiento libre. Plasmó un mundo absurdo, ilógico, donde la razon no puede dominar al subconsciente. ¿Le parece a usted amable lector o lectora que este planteamiento es absurdo? Pues es exactamente lo que hace Andrés Manuel López Obrador con su concepcion surrealista del mundo que nos quiere vender como real porque solamente así explicaríamos tantos desatinos irracionales y deslices gubernamentales que por desgracia muchos observan azorados y otros convencidos de que así se construye un mejor mundo. Al tiempo.
This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.