Sin lugar a duda los principales elementos del Movimiento de Regeneración Nacional han entendido que estos tiempos son la única oportunidad
para hacerse de una pequeña, o grande fortuna, que les permita vivir cómodamente y sin angustias los años venideros, porque al paso que van les resultara difícil mantener la mayor parte de los gobiernos municipales y estatales ante las evidentes pruebas de que no son más que una caterva de ladrones y vividores peores que los integrantes de las demás fuerzas políticas.
El propio presidente de la República podrá ser incriminado penalmente al término de su mandato a causa de la disposición de enormes cantidades de dinero para satisfacer sus más grandes caprichos y sus más caros anhelos de permanencia en el poder. La forma en que el titular del Poder Publicó en el país dispone del dinero de los mexicanos, será el principal motivo para su incriminación una vez que deje de ser el responsable de la conducción del Gobierno Federal en poco menos de dos años.
Y el problema es que esa discrecionalidad del titular del Ejecutivo para determinar en qué se gasta y lo que se gasta será la que le cause mayores problemas porque hasta ahora las auditorías han determinado que la discrecionalidad ha sido la constante y existen diversos saldos que no se sabe en donde fueron a parar, porque sin ningún empacho el mismo determina que, cuanto, y a quien se le entregan los caudales públicos, pensando que su mayoría parlamentaria le será suficiente para evitar su incriminación.
Por lo pronto ya no podrá utilizar discrecionalmente los ahorros de su gobierno, tal y como lo determinó la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y mucho menos asignar partidas presupuestales por decreto como lo ha venido haciendo, en detrimento de la Administración Pública Federal, porque está circunstancia es incompatible con la facultad exclusiva de la Camara de Diputados de aprobar el Presupuesto de Egresos, además de autorizar el destino y monto del gasto público federal para cumplir con los objetivos constitucionales reflejados en el Plan Nacional de Desarrollo.
Y no es que el Presidente sea el único que lo hace, porque los ejemplos son muchos y variados: Moriya Villaseñor, hija del alcalde de Tacámbaro, Michoacán, el morenista Artemio Moriya Sánchez, fue detenida por autoridades de Estados Unidos al intentar cruzar a México con casi 250 mil dólares en efectivo y dos armas. La mujer de 28 años intentó cruzar el lunes pasado desde Dallas, Texas, por el Puente Internacional Juárez-Lincoln, en Laredo, reportó la Oficina del Sheriff del Condado de Webb. Las autoridades le encontraron a Moriya 248 mil dólares y dos pistolas Glock y Colt en los paneles de las puertas traseras de un vehículo Passat 2022. Parte del dinero, en tres fajos, Moriya los traía en su cintura, supuestamente para evitar el pago de impuestos. Y este es solamente un ejemplo del saqueo que los alcaldes morenistas han implementado sabedores de que quizá en la siguiente elección el Movimiento de Regeneración Nacional no alcance la mayoría parlamentaria. Para decirlo más claro, sin duda algúna, los morenistas son peores que panistas y tricolores en materia de corrupción, y las muestras las observamos en la mayor parte de las entidades federativas y las principales ciudades de nuestra aún generosa geografía. Pobre país, pobres mexicanos. Al tiempo.
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Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.