Fuera Caretas...

Sin lugar a duda existen muchos hombres y mujeres que para nada le caemos bien al señor Andrés Manuel López

Obrador porque nunca le gustaron las críticas, esas que le hacemos cuando de relatar y resaltar sus excesos totalitarios se trata. Y no es una consigna como el mismo lo afirma, porque él si tiene consignas en las conferencias que encabeza todos los días por la mañana, donde también tiene quienes le ayuden a combatir con mentiras las afirmaciones de los periodistas de todo el país. Hasta ahora esa caterva de muchachos que de periodismo entienden lo mismo que el Presidente entiende de lo que significa Bienestar, no saben siquiera hilar una oración. Pero por desgracia esa es la realidad de este país, y lo peor de todo es que hasta ahora si alguien ha sido un triunfador en su propósito, es Andres Manuel Lopez Obrador, el Peor presidente de la República que hayamos tenido en toda la historia patria. Y digo que en lo único que ha sido exitoso es en destruir todo lo que toca, además de ejercer su gobierno de forma caprichosa sin pensar el daño que le causa a esa sociedad que ha dividido entre "fifis" y conservadores, porque desde luego que él se asume como el propietario de la insurgencia que está, según sus propias palabras, encabezando una transformación que hasta ahora no tiene pies ni cabeza, porque lo que más ha alcanzado, y hay que decirlo con toda propiedad, es una riqueza inconmensurable que Hasta ahora detentan sus hijos, pero ya habrá forma más adelante de hacerlos pagar por ello.

Uno de los blancos favoritos de Andrés Manuel han sido los hombres del dinero, porque hasta ahora existen muchos que no se han sujetado a los negocios al amparo del poder, y mucho menos a su malentendido Cuarta Transformación, que no es otra cosa que una regresión al autoritarismo que durante tanto tiempo padecimos los mexicanos. Lo que me queda claro, es que, en los registros de la historia patria, ya tiene uno de los sítiales más deleznables, aún por encima de Antonio de Padua Severino López de Santa Anna, aquel que vendiera la mayor parte de nuestro territorio.

Pero también identifica adversarios entre los hombres del dinero, y en particular ha arreciado las baterías mañaneras contra Claudio X. Gonzalez, quien hasta ahora ha tenido la valentía para criticar los excesos que el presidente de la Republica comete desde el poder. Lo que más le ha dolido al inquilino de Palacio Nacional, es que Claudio X. Gonzales se haya atrevido a compararlo con los sátrapas, Miguel Díaz Canel, quien por cierto ha recibido cincuenta millones de dólares de parte del presidente de la República, al igual que los tiranos venezolanos, nicaragüenses y lo que se acumule en los tiempos venideros.

Sin lugar a dudas aquel que tanto pululó por todos los rincones del país sembrando la discordia y prometiendo que las cosas cambiarían cuando el alcanzara el poder, lo que hasta ahora no ha ocurrido porque de lo que se ha tratado su gobierno es de someter a todos los mexicanos a sus propios designios, es decir, en una moderna esclavitud para que sigan apoyando un movimiento, que hasta ahora, lo único que ha logrado es el empobrecimiento de los mexicanos y un tiránico gobierno que no tiene pies ni cabeza.

El populismo rampante que hasta ahora encabeza Andrés Manuel López Obrador con su mal llamada “Cuarta Transformación” no es más que un bodrio barato, ya que, si de algo tenemos conciencia plena los mexicanos, es de que somos un país libre, porque en diversas ocasiones hemos tomado las armas para alcanzar y mantener nuestra libertad. López Obrador terminará su encargo en año y medio, y este país seguirá vigente recordando el amargo episodio que ha sido su sexenio, y regresaremos a nuestra normalidad democrática. De eso puede tener toda la seguridad. Al tiempo.

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Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con cincuenta años de experiencia en diversos medios de comunicación.