Sin lugar a duda, el señor Donald Trump es un hombre valiente además de sumamente rico. Para decirlo más claro, no
se si es valiente, osado, o simplemente un temerario, porque ya le han dado diversos avisos de que alguien lo quiere ver muerto, y quizá siga empecinado a realizar uno de los que seria un magnicidio de esos que se acostumbran en el vecino del norte cuando alguien estorba a la clase política del país.
Pero el señor Trump es muy bueno para hacer dinero, pero también lo es para denostar a los demás, pero lo que más le gusta es andar molestando a los principales hombres y mujeres del llamado Stablishement, que no es otra cosa que un grupo de personas que ejerce de una u otra manera el poder en algún país, una organización, o en un ámbito determinado. En este país sería la Clase Política.
Los hechos ocurrieron en Pensilvania el sábado por la noche, y le pusieron una muestra a los cuerpos policiales que tanto ha venido presumiendo el Presidente de la Republica, pero de este país, que hasta ahora lo único bueno que podemos decir es que la delincuencia organizada tiene mayores posibilidades de poder llevar la seguridad Pública, porque todos los cuerpos policiales en México están infestados de delincuentes,
Así de simple nuestra circunstancia, quienes detentan el mando en todo el país, o sea en México, y son las bandas delincuenciales, esas que Andrés Manuel López Obrador consiente tanto porque también tienen derechos humanos, y que a cada rato los amenaza con decirles a sus mamacitas que se están portando mal. Y eso habla de que el propio Presidente de la Republica ha sido de una u otra forma enemigo de los ciudadanos.
O quizá es que el presidente Andrés Manuel López Obrador también es amigo tanto de los delincuentes como de los ciudadanos, pero no de todos, porque hasta en eso hay clases. Un ejemplo de esta circunstancia es la forma en que ha tratado a los periodistas de todo el país, y ha sido con una singular alegría que ha venido pidiendo la salida de muchos de nosotros, pero hay algo que no ha podido hacer.
Y ese algo es que los periodistas hemos seguido haciendo nuestro trabajo aunque no le guste, porque no hacemos periodismo para agradarle, y que los periodistas estamos haciendo nuestro trabajo acerca de los excesos del fenómeno político, y reseñamos tanto lo que hacen bien como lo que hacen mal, pero sobre todo, mantenemos vigente la tarea de informar, y formar opinión a través de nuestras colaboraciones periodísticas. Como el mismo señalo alguna vez, “Benditas redes sociales”, porque seguiremos haciendo nuestro trabajo, aunque no le guste, porque cada día le gusta menos las reseñas que hacemos de sus dislates. Así de simple, y lo vamos a seguir haciendo. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septién. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.