Cuando a un mandatario se le termina el tiempo de su gestión, por lo regular se convierte en el visitante más cálido
y honroso de lo que ha logrado, y el legado que deja en cada una de las entidades federativas. Eso es lo mismo que ha estado ensayando Andrés Manuel López Obrador después de casi seis años en el ejercicio del poder, y los que le restan con la señora Sheinbaun, porque podemos tener toda la seguridad de que se entrometerá en las decisiones si se ratifica su triunfo.
Y lo digo porque el aún mandatario siempre ha sido un zoon Politikon en toda la dimensión de su significado. Y eso habla de que como quiera que sea el seguirá haciendo política interna o externa, pero seguirá vigente y con muchas ganas de incidir en los acontecimientos públicos del país, pero sobre todo, pretendiendo disfrazar las órdenes como consejos, lo que provocará un debilitamiento en quien habite Palacio Nacional.
Desconozco hasta donde pueda incidir el mandatario en la señora Sheinbaun, pero creo que le encantaría mucho que ella lo lisonjeara y lo tratara como el máximo líder, y el non plus ultra de los estadistas que ha tenido este país. Pero en lo personal creo que será muy difícil hacer un comparativo con el pasado, aunque tengamos la seguridad de que la señora Sheinbaun será un simple adorno si el señor López Obrador comienza con sus ansias de mantener altas cuotas de poder.
Andrés Manuel López Obrador siempre ha sido un hombre gustoso de las esferas del poder, y ha ejercido el poder de una manera totalitaria porque desde que era Jefe de Gobierno de laz Ciudad de México, dio una muestra de que las cosas se hacen como él dice o no se hacen, pero lo que esperamos los mexicanos es que no se extralimite cuando las decisiones de la señora Sheinbaun no le parezcan.
Lo único que me da confianza es que este país siempre ha tenido una misión, y no es otra cosa que mantener al país dentro de los,parámetros de la democracia, porque muchos hemos luchado por ella, también hay que señalar que hemos regado la sangre de aquellos que en el pasado defendieron denodadamente a la nación incluso con la vida misma, aunque no veo al señor López en un evento como esos.
Lo primero que tengo que decir, es que la presidenta de la República tiene que dar una muestra de su autonomía como mandataria, y ahí están las muestras en el pasado cuando algunos mandatarios tuvieron que exiliar a sus antecesores para evitar problemas. Desconozco hasta donde la señora Sheinbaun, si es ratificada, tendrá consideraciones con el señor López Obrador, pero lo que no pueden hacer es jugar al gato y al ratón. Así de simple. Al tiempo.
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Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septién. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con 50 años de experiencia en diversos medios de comunicación.