Sin lugar a dudas el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, es todo un personaje y a veces tiene visos de cacique señalan sus gobernados, aunque sus amigos prefieren adularlo ya que saben de su generosidad cuando las fiestas entran en la etapa de las intimidades, es decir, cuando el círculo más cercano se queda compartiendo los efectos de las bebidas espirituosas, y donde se toman decisiones que afectan a cerca de tres millones de habitantes con que cuenta el suriano estado.
Cuna de la gesta heroica de la independencia, Guerrero es pródigo en lugares históricos y en afamados apellidos de hombres y mujeres que pusieron su vida al servicio de la patria para buscar la emancipación de la Corona Española.
Guerrero se divide en siete regiones: Acapulco, Costa Grande, Costa Chica, Centro, Montaña, Norte y Tierra Caliente. Todas disímbolas entre si aunque parecidas en aspiraciones y raigambre histórica. Tradicionalmente se ha considerado a la región de La Montaña como una de las zonas más pobres, incluso se menciona que Xalpatláhuac es el municipio con mayor pobreza de todo el país. Sea lo que fuere, el problema de Guerrero es que sus gobernantes nunca lo han podido sacar de ese nivel de postración en que se encuentran inmersos la mayor parte de sus habitantes.
Cuando Ángel Aguirre Rivero fue gobernador interino del PRI a causa del problema de Aguas Blancas que provocó la salida del poder de Rubén Figueroa, fue acusado por el PRD de haber ordenado la muerte de más de quinientos de sus correligionarios, pero curiosamente en cuanto se vistió de candidato por el Partido de la Revolución Democrática, se le quitó lo asesino, se volvió el hombre más honesto, el que sacaría a Guerrero de su añeja postración, el que velaría porque todos tuvieran al menos los mínimos de bienestar como corresponde a las civilizaciones de estos tiempos. Ángel Aguirre Llegó por segunda vez a la gubernatura de Guerrero, y pareciera que llegó “desencanchado” porque no ha sabido acomodar sus piezas para que su gobierno tenga orden y funcionalidad. Por otra parte, sus constantes cambios entre los integrantes de su gabinete muestran una gran inestabilidad.
La Costa Chica va de Acapulco a los límites con Oaxaca en Pinotepa Nacional, y es una región en la que nadie se salva del crimen organizado. Ni propios ni extraños, porque ahí imperan las leyes de los fuertes, y hasta ahora quienes han sido los más fuertes son los criminales. Esto ha afectado considerablemente la economía de la región, y hasta ahora nadie ha sido lo suficientemente hábil para entender que la criminalidad es parte de esas llamadas guardias comunitarias que se esconden detrás del membrete de la Cracs, y que hasta ahora el gobierno del estado ha sido incapaz de contenerlas y de regularlas. Son más de 400 mil personas las que están siendo afectadas por la criminalidad mientras el gobernador se la pasa de fiesta en fiesta. Ayutla, Azoyú, Copala, Cuajinicuilapa, Cuautepec, Florencio Villarreal, Igualapa, Juchitán, Marquelia, Ometepec, San Luis Acatlán, San Marcos, Tecoanapa, Tlacochistlahuaca y Xochistlahuaca, han sido condenadas al abandono. Pobre Guerrero con un gobernador así. Al tiempo. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.