Opinión

Toda la razón tiene el dirigente del PRI, César Camacho Quiroz, de que es el momento de quitarle el freno al desarrollo de México, para generar fuentes de empleo y que la economía crezca, como lo señaló en su gira por Iguala, Guerrero, pero quien no entiende esta frecuencia es la senadora Cristina Díaz, que realiza una gira por el país para apoyar a los candidatos del tricolor, pero su central la  Confederación Nacional de Organizaciones Populares, no tiene el apoyo de bases trabajadores, ni de asociaciones y agrupaciones políticas y sociales, por lo menos en el DF ¡predica en el desierto!

Este principio de mayo ha estado marcado por las tristes imágenes de un país que, por más que se quiera disimular, atraviesa por una de las peores crisis de seguridad de su historia. Como película de acción hollywoodense, este viernes vimos imágenes de camiones incendiados en las principales carreteras de acceso al estado de Jalisco; al tiempo que comercios, gasolineras y establecimientos mercantiles eran atacados por presuntos miembros del crimen organizado; hechos que, desgraciadamente, se fueron extendiendo hacia los estados de Colima, Michoacán y Guanajuato. Sucesos adjudicados al cártel de Jalisco “Nueva Generación”, en respuesta al “Operativo Jalisco”, diseñado para capturar a los líderes de este grupo delincuencial, sin resultados hasta el momento, por cierto. Las imágenes, distribuidas por los portales noticiosos y las redes sociales, mostraron una realidad inocultable: México padece de terrorismo.

En días pasados el ex jefe del GDF, Andrés Manuel López Obrador, fue entrevistado en un diario de tendencia universal. La entrevista fue bastante aterciopelada, sin preguntas incómodas o difíciles.